Breve historia de mi trayectoria académica y profesional
Conrado Badenas Mengod
3 de agosto 2002
A la edad de 4 años ingresé en el sistema educativo español, y hasta la fecha
he seguido dentro del mismo de manera ininterrumpida. Los años de estudio en
parvulitos, E.G.B., B.U.P, C.O.U. y Universidad los tengo documentados en papel.
A partir de la compra de mi primer PC en 1993 empiezo a tener un sistema de
archivo de documentación que hoy puedo seguir consultando. Así pues, voy a basarme
en material informático ya existente que he encontrado en mis discos duros (perdón
por la metonimia).
- En primer lugar, incluyo mi curriculum vitae redactado en inglés (curricul.html:
3-ago-2002), que detalla mi trayectoria profesional e investigadora desde 1991
(tercer año de carrera) hasta ahora. Es el documento más actualizado que tengo
porque de él me he servido en varias ocasiones a la hora de intentar conseguir
un trabajo que me permitira vivir un poco más cómodamente de lo que se puede
únicamente con el mísero sueldo de un Profesor Asociado de Universidad a Tiempo
Parcial. El original lo he escrito y lo mantengo actualizado con el programa
LYX (http://www.lyx.org), con lo que puedo traducirlo a los formatos
LATEX, DVI, PostScript, PDF, y también HTML.
- En segundo lugar, incluyo otro curriculum vitae, esta vez redactado en castellano
(conrCICT.pdf: 6-may-2001). Sigue el modelo oficial de Curriculum Vitae
para el Plan Nacional de I+D+I (2000-2003) de la Comisión Interministerial de
Ciencia y Tecnología (CICyT), y debido a su rigidez es muy difícil incluir información
que yo considero interesante pero la CICyT no. Parece increíble pero está escrito
en LATEX, aunque no usa las clases estándar de documento sino una nueva clase
(cvcict00.cls) que se puede encontrar en ftp://tex.unirioja.es/pub/tex/modelos/curriCICT2000/.
Desafortunadamente, el conversor de LATEX a HTML que tengo no entiende esta
clase, no he podido convertir el documento a formato HTML, y por ello el documento
lo he incluido en formato PDF.
- En tercer lugar, he de mencionar que desde que me explicaron cómo funciona el
cotarro docente universitario (finales de primero de carrera) he querido ser
Profesor Titular de Universidad para así cobrar un pastón de por vida sin pegar
ni golpe. Para ello, el procedimiento de facto en la Universidad de Valencia
empezaba por ganar mediante concurso de méritos una plaza de Profesor Ayudante
contratado. Así que empecé a conseguir méritos. En julio de 1995 ya me sentía
preparado para empezar a concursar, pero tuve que esperar a finales de 1996
para conseguir únicamente una plaza de Profesor Asociado a Tiempo Parcial (3h)
en el Departamento de Termodinámica. Para ello presenté una instancia-curriculum
(asociad.html: 19-nov-1996) con un Anexo bastante jugoso. Esta plaza
y las siguientes de Asociado a Tiempo Parcial que fui ganando en cursos posteriores
me sirvieron para aumentar mis méritos en materia de docencia universitaria
pero nunca pude conseguir lo que yo realmente quería. Sin embargo, en julio
de 2001 volví a presentarme a un concurso de Ayudante (ayudauji.html:
6-jul-2001) y a finales de septiembre de 2001 me telefonearon desde el Servicio
de Recursos Humanos de la Universidad Jaume I (UJI) para informarme de que había
ganado la plaza. ¡Por fin podría ser Ayudante después de seis años intentándolo
infructuosamente! Evidentemente, la rechacé.
Si uno estudia los documentos incluidos hasta ahora se da cuenta de que 1998
es un año extraño: dejo de trabajar en el CEAM, dejo de tener publicaciones
en colaboración con mis antiguos colegas del Departamento y del CEAM, cambio
de directores y proyecto de tesis, y no vuelvo a tener un trabajo remunerado
en el campo de la teledetección. Ahora detallo lo que pasó:
- En julio de 1997 uno de mis directores de tesis (V. Caselles) me expulsó de
su unidad de investigación en el Departamento y dimitió como mi director porque
había descubierto que yo había escrito un comentario para una importante revista
americana en el que probaba que su últimas investigaciones tenían fallos significativos.
Elevé el asunto ante la Comisión de Doctorado (carta.html: 29-oct-1997),
aunque sin éxito.
- En el CEAM me ordenaron que elaborara un manual de instrucciones ``para tontos''
de la aplicación informática que había programado para el tratamiento de datos
de satélite por si hiciera falta usarla ``en caso de que yo no estuviera''
(hrptinst.html: 29-sep-1997). Luego, que escribiera un informe indicando
el estado actual del trabajo que estaba desarrollando (presente.html:
7-ene-1998). El 19 de enero de 1998 me comunicaron el despido. Como todavía
me quedaban 19 días hábiles de vacaciones del verano anterior, tuvieron la desfachatez
de ordenarme que me tomara esos días de vacaciones sin aparecer por el CEAM,
que en mi casa escribiera durante esos días un informe detallando las actividades
desarrolladas en el CEAM durante los cuatro años y medio que estuve allí (pasado.html:
27-ene-1998) y que volviera cuando se me terminasen las vacaciones (3 de febrero)
para darme el finiquito a cambio del informe.
- A principios de febrero de 1998 mi primer director de tesis dimitió formalmente.
Conseguí que mi segundo director (M. Millán, director ejecutivo del CEAM) me
firmara una petición de prórroga de cinco años para acabar la tesis, pero cuando
la presenté a principios de marzo de 1998 en Tercer Ciclo, me informaron de
que mi segundo director había dimitido formalmente hacía unos días. Me quedé
sin directores, y el plazo para presentar una tesis acabada según el proyecto
vigente (ptesis95.html: 6-jun-1995) o una petición de prórroga terminaba
en unos pocos meses.
- Ningún doctor del Departamento ni de otros departamentos ni de otras universidades
aceptó ser mi director cuando se lo pedí. Sólo un amigo aceptó cuando vio que
nadie más me quería ayudar. Sin embargo, el Consejo de Departamento rechazó
mi propuesta de director tras una ajustadísima votación secreta de los miembros
que perdí por un único voto de diferencia. Tras negociar con algunos ``caudillos''
del Departamento, conseguí que el Consejo aceptara por unanimidad mi nuevo director
a cambio de que presentara un nuevo proyecto de tesis (ptesis98.html:
mayo-1998) y que consiguiera que el CEAM certificara que no tenían interés en
las investigaciones incluidas en el nuevo proyecto. Ahora tengo tiempo hasta
mayo de 2003 para terminar la tesis.
- Inmediatamente después de todo esto me comunicaron que no me prorrogarían el
contrato de Profesor Asociado 3h. Sin embargo, no contaron con que uno de los
profesores del Departamento obtuvo una reducción de su carga docente y había
que contratar a un Asociado para que se hiciese cargo de la docencia que ahora
le sobraba al Departamento. Me presenté al concurso y gané una plaza de Asociado
6h para el curso 1998-99. De nuevo, volvieron a no prorrogarme el contrato tras
el verano de 1999, pero esta vez habían aprendido la lección y ya no convocaron
más concursos de provisión de plazas.
- Mientras sobrevivía únicamente con el mísero sueldo de un Asociado 6h, intentaba
encontrar algún trabajo en el campo de la teledetección que me permitiera vivir
algo mejor. A pesar de presentar mi curriculum a todas las (escasas) ofertas
en este campo de las que tenía conocimiento, nunca conseguí nada. En dos ocasiones
sucedió que tras sendas entrevistas personales (una en Madrid, y la otra en
Barcelona) en las que mis futuribles jefes confesaron haber quedados encantados
conmigo, éstos me comunicaron que no requerían mis servicios. En particular,
lo que hizo el de Madrid ``cantó'' escandalosamente a intervención externa:
me llamó al móvil para darme puerta cuando estaba subiendo al tren de vuelta
a Valencia. El de Barcelona al menos fue más diplomático y esperó una semana
para informame de que mis servicios no eran requeridos. Luego he sabido que
uno de mis enemigos más encarnizados (puedes consultar su ficha en http://telenet.uva.es/qeq/qeq.php?id=29&estado=mostrar_ficha&tipo=personas&nombre=&apellidos=&provincia=&pais=&lineas=")
tiene un inmenso poder dentro de este campo, al menos en España (presidente
de la Asociación Española de Teledetección, AET, asesor del programa climático
del Ministerio de Ciencia y Tecnología) y Europa (asesor de la European Space
Agency, ESA), por lo que ni siquiera he vuelto a intentarlo desde mi último
fracaso.
Y ahora las buenas noticias: las personas sobresalientes pueden superar situaciones
límite como ésta si actúan reflexivamente aparcando temporalmente a un lado
toda la mala leche acumulada.
Decidí ser profesor de secundaria (inicialmente pensé en ser interino, o bien
hacer sustituciones, o como último recurso ser contratado en la privada) el
tiempo suficiente para recuperarme socio-económicamente mientras termino la
tesis, pero en septiembre de 1998 olvidé matricularme en el Curso de Adaptación
Pedagógica (CAP). Al año siguiente conseguí acordarme y terminé el CAP en marzo
de 2000. Para ello, tuve que presentar una memoria de los contenidos del módulo
general del ciclo teórico (capteo.html: 9-feb-2000), una unidad didáctica
para el módulo específico (capesp.html: 29-feb-2000), y un examen para
las prácticas en instituto (cappra.html: 22-mar-2000).
Estaba tan ocupado con las clases en la Universidad que durante los siguientes
meses se me olvidó preocuparme por averiguar cómo funcionan las oposiciones
y bolsas de trabajo. Los errores los cometo sólo una vez, y cuando en diciembre
de 2000 me dijeron que tampoco me prorrogarían el contrato de Asociado, esta
vez porque el vicerrector al que sustituía quería dejar de serlo, decidí que
ese año no me olvidaría de presentarme a oposiciones.
Cuando salió en prensa lo del decreto de humanidades de Pilar del Castillo pensé
que sería una buena oportunidad para prepararme la especialidad de Matemáticas.
Pedí información y muestras de temarios a varias academias de preparación de
oposiciones (http://www.cen.edu, http://www.cede.es) pero no me
acabaron de gustar sus materiales, aunque sí la retransmisión de noticias relacionadas
con las pruebas. Así me enteré de que en los próximos tres años se iban a convocar
oposiciones en la Comunidad Valenciana para que la mayor parte de interinos
tuvieran oportunidad de pasar a funcionarios.
En abril la Consejería de Educación publicó en el DOGV la orden reguladora de
las pruebas selectivas, y había muchas más plazas para Física y Química que
para Matemáticas, así que me decidí por la especialidad que mejor domino. A
finales de abril conseguí los temarios necesarios: unos 10 kg de papel (calculo
que deben ser unas 2000 hojas de tamaño DIN-A4 escritas por ambas caras). Cuando
vi toda esa montaña de celulosa supe que no tendría tiempo de tenerlos estudiados
en dos meses y decidí hacer sólo un repaso rápido de mis libros de Química de
primero de carrera y C.O.U., leerme los 14 temas de la parte B, y leer todos
los temas de la parte A que pudiera antes del primer examen del 26 de junio.
Sólo pude acabar de leer los primeros 39 temas de la parte A (en total eran
75), y en mi tribunal el azar decidió que tuviéramos que elegir entre los temas
10 y 25. Afortunadamente, el 25 me lo había leído hacía dos días y era el único
del que había estado repasando las fórmulas que incluía porque había unas deducciones
matemáticas muy interesantes que no había visto antes. En cuanto a la parte
B, salió el tema 4: el único que me había leído dos veces porque me había gustado
especialmente. En el siguiente examen no tuve ninguna complicación: todos los
problemas eran facilísimos. Y en el último examen la fortuna me dio a elegir
entre el tema 57 (oxidación y reducción) o el 27 (óptica física). Después de
estar un año dando clase de Laboratorio de Óptica en tercer curso de la Licenciatura
en Ciencias Físicas y pasarme otro con el grupo de Sistemas Ópticos de la UJI
(http://sic.uji.es/ocit/grups/grup87.html) lo que no sé es cómo no saqué
una mejor nota en este tercer examen.
Mientras tanto, en la UJI me dijeron que querían que siguiera un año más con
ellos y que me prorrogarían el contrato de Profesor Asociado 6h, así que el
31 de julio de 2001, cuando tuve que elegir mi primer destino como profesor
funcionario en prácticas, sólo pensaba en quedarme lo más cerca posible del
campus del Riu Sec. Desgraciadamente, al presentarme ante la Mesa de Adjudicación
el Presidente de Mesa me informó de que para poder elegir algunas de las tres
plazas que aún quedaban libres en Institutos de Educación Secundaria (I.E.S.)
de la ciudad de Castellón de la Plana tenía que tener el Certificado de Capacitación
para la Docencia en Valenciano (CCDV). Lo más cerca que pude elegir sin tener
el CCDV fue en Segorbe. Escogí la única plaza que quedaba en este municipio
(otro elector ya había cogido la única plaza en el otro I.E.S. de Segorbe) y
ahora estoy en un centro en el que sólo se imparte Educación Secundaria Post-Obligatoria
(Bachilleratos y Ciclos Formativos). Se puede consultar más información sobre
este centro en la página web del instituto que un grupo de trabajo de profesores
del centro elaboramos (http://www.uv.es/~conrad/iesaltopalancia es la
dirección provisional hasta que se integren estos contenidos con los preexistentes
en el servidor de la Consejería de Educación: http://intercentres.cult.gva.es/intercentres/12003663).
Durante el curso 2001-2 he asistido al Curso Específico B para obtener el CCDV.
Después de aprobar el examen correspondiente en abril, y así obtener el CDDV,
el pasado 30 de julio de 2002 pude elegir plaza provisional muy cerca de mi
domicilio habitual. En concreto, este curso 2002-3 estaré en el I.E.S. de Benaguasil
(http://intercentres.cult.gva.es/intercentres/46020261), un municipio
que ya conocía por haberlo visitado en una ocasión el año pasado con motivo
de una convención de Linux. De nuevo, en la UJI me han dicho que quieren que
siga un año más con ellos en calidad de Profesor Asociado, pero he declinado
amablemente la oferta porque me cansé de chupar tanta carretera el curso pasado
y prefiero centrarme en la docencia en secundaria.
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2002-08-03