El cuidado adecuado de los pies durante el embarazo es crucial para mitigar los efectos incómodos que el aumento de peso y cambios hormonales pueden causar.

El cambio en la presión por la hinchazón (edema) y la forma del pie puede conducir al desarrollo de callosidades y durezas en áreas de fricción. Además, las uñas pueden volverse más quebradizas o propensas a infecciones fúngicas.

Elegir calzado adecuado, mantener una buena hidratación y considerar el uso de plantillas ortopédicas son medidas efectivas para mantener una buena hidratación la salud podológica en esta etapa.

Consultar con un podólogo puede ofrecer estrategias personalizadas para afrontar cualquier desafío específico que una embarazada pueda enfrentar con sus pies.

Desde la Clínica de Podología de la Universitat de València, destacamos la importancia de la prevención y el seguimiento profesional durante el embarazo para evitar posibles complicaciones en la salud de los pies. Un control podológico adecuado no solo mejora la comodidad y el bienestar de la futura madre, sino que también contribuye a su calidad de vida en esta etapa de cambios físicos. Recomendamos realizar revisiones periódicas para detectar y tratar cualquier alteración a tiempo, asegurando así una pisada saludable y sin molestias.