• Universitat de València
• Universidad Rey Juan Carlos I

• Myriam Catalá Rodríguez
• Mª Rosa De las Heras González
• Paula Herrero Garretas

Los bioensayos permiten evaluar de forma cualitativa y cuantitativa las sustancias tóxicas causantes de la contaminación ambiental, y presentan ventajas como su bajo coste o la posibilidad de evaluar los efectos de los contaminantes durante periodos más prolongados que los análisis químicos tradicionales. No obstante, la evaluación sistemática del impacto de la contaminación sobre el medio ambiente o sobre la salud humana o animal requiere bioensayos con procedimientos de miniaturización, conocidos como microbioensayos. En los estudios de toxicidad acuática de este tipo de ensayos se pueden utilizar microorganismos, como bacterias, protozoos, invertebrados y microalgas, siendo estas últimas las más empleadas. No obstante, los microbioensayos con microalgas no son representativos del medio terrestre, y requieren tiempos de exposición al tóxico de entre 24 y 72 horas, por lo que no se consideran métodos ultrarrápidos. Existe por lo tanto la necesidad de un microbioensayo que permita obtener una evaluación de la toxicidad de una muestra acuosa, en un tiempo breve y de manera reproducible y eficaz, siendo los resultados obtenidos, al mismo tiempo, representativos y extrapolables a los ecosistemas terrestres.

Investigadoras de la Universidad Rey Juan Carlos y la Universitat de València han diseñado un microbioensayo y un kit ultrarrápido capaz de estimar la toxicidad ambiental de muestras de agua mediante el uso de ficobiontes aislados de líquenes. Los ficobiontes son de los pocos organismos tolerantes a la desecación total con capacidad de rehidratarse y recuperar sus funciones rápidamente. Al rehidratar el ficobionte se produce un estallido intracelular de radicales libres, cuyo patrón se modifica en presencia de contaminantes ambientales. Los cambios en la producción de radicales libres se determinan mediante el uso de una sonda de fluorescencia específica y de un fluorómetro. Este método permite detectar toxicidad antes de que se produzca la muerte celular, detectando cambios en el metabolismo debidos a la interacción del ficobionte con la matriz tóxica.

La tecnología es aplicable en los campos de la biotecnología, el medio ambiente, la industria ambiental y dentro del sector ecotoxiecológico. Puede ser de interés para empresas de gestión ambiental, empresas de control y reducción de la contaminación del aire, empresas de gestión de recursos hídricos, y entidades dedicadas a la evaluación de calidad ambiental, investigación y desarrollo.

Las principales ventajas de la tecnología son:

• Resultados de toxicidad ultrarrápidos, obtenidos en pocos minutos.
• Bioensayo fácilmente automatizable, que permite el análisis de un elevado número de muestras y de poco volumen por muestra.
• Organismos tolerantes a la desecación. Facilidad de almacenamiento y de transporte.
• Facilidad en la implementación del método, que permite el uso de fluorómetros portables para el análisis de muestras in situ.
• Gran relevancia ecológica de los ficobiontes, que los hace útiles como herramienta de vigilancia y seguimiento ambiental de diferentes hábitats.
• Bajo coste económico del bioensayo.

• Patente solicitada