"Colapso en las aulas", Gaceta Universitaria, Núm. 74. 15 febrer 1967.
El día 23 de abril de 2011 se cumplieron 40 años de la detención de un grupo de estudiantes de la Universidad de Valencia por miembros de la Brigada Político-Social, la policía política del General Franco. Tras 19 días en los que fueron sometidos a torturas y brutales interrogatorios en la Jefatura Superior de policía de Valencia, pasaron a la cárcel. Más tarde, el Tribunal de Orden Público les acusó de asociación ilícita y propaganda ilegal con el propósito de lograr “la movilización de los españoles (…) contra los atropellos y violaciones de los derechos humanos, para acabar con la dictadura e instaurar la libertad” (Sumario 593/71 del TOP). Por tales “delitos” se solicitaba 119 años de cárcel. Dos años antes un grupo estudiantes valencianas vivían una experiencia similar. Detenidas durante el estado de excepción de enero de 1969, fueron encarceladas al negarse a pagar la multa impuesta para no contribuir con ello a sostener la dictadura.
No fueron los primeros ni los últimos estudiantes de la Universidad de Valencia víctimas de la represión franquista. Pero su experiencia nos permite estudiar la movilización de la Universidad contra la dictadura, en unos años de cambio cultural y social, y mostrar esa movilización y esos cambios a través de sujetos y experiencias en las que podría reconocerse una extensa generación: todas las personas que vivieron activamente el fin de larga noche del franquismo.
La exposición Universitarios contra la dictadura reivindica la importancia cardinal del movimiento estudiantil en la lucha contra la dictadura, en la construcción de la democracia española. Es un ejercicio de memoria y un homenaje reparador, pero, sobre todo, es una reflexión cargada de actualidad, en tanto defiende la vigencia de los valores con los que esta generación pensó un mundo más justo.
Pero, ¿para qué contar?, ¿a quién?...
Contar para contribuir a mostrar la democracia como un bien conquistado en la calle, como el fruto de un esfuerzo coral. Para reconocer en los valores, las éticas y las convicciones que movieron a una parte de la ciudadanía a luchar contra la dictadura y por la democracia el patrimonio ético de la sociedad en su conjunto, el sedimento del Estado de derecho. Para entender el presente y como instrumento de futuro.
Contar, sobre todo, a las generaciones nacidas en democracia, sin la imposición de un relato único, mediante la creación de un espacio que permita comprender el conflicto, valorarlo y trabajar con él.
Grup d'estudiants de Filosofia i Lletres vinculats al Sindicat Democràtic d'Estudiants en el Claustre de la
Universitat Literaria de València. 1966. Arxiu Manuel García - Ferran Montesa
Los contenidos de la muestra se organizan en 5 espacios expositivos, 4 de carácter cronológico y uno transversal:
Ámbito 1. Silencio. 1939-1956
En este primer ámbito se hará patente ante el/la visitante el control ideológico de la universidad por el franquismo entre 1939 y 1950, la represión y las depuraciones de profesores y alumnos, la organización de una universidad minoritaria y clasista como una milicia al servicio del Estado, haciendo especial hincapié en la Universidad de Valencia, y en episodios como el fusilamiento del rector Peset. Asimismo, trataremos el control de la universidad a través del SEU, sindicato único franquista que, paradójicamente, despertará con sus limitaciones deseos de libertad. El adoctrinamiento de los estudiantes, que pretendía garantizar la continuidad sociológica del régimen, fue adquiriendo mayor importancia, y una dificultad creciente, conforme los años hicieron que el recuerdo de la guerra civil perdiera peso como elemento legitimador. Estos, sin embargo, son años de silencio, de control absoluto, de miedo.
Ámbito 2. Conciencia.
1957-1964
Desde finales de los años 50 asistimos al nacimiento de distintas iniciativas de oposición al SEU falangista en las universidades españolas. En 1955, el 90% de los estudiantes universitarios españoles es contrario al Movimiento Nacional, según una encuesta encargada por el rector Laín Entralgo. Son hijos de la burguesía, en su mayoría de familias adeptas al franquismo, no olvidemos que la universidad es todavía minoritaria. El Régimen constata con estupor que está perdiendo contacto con el “futuro de la nación”, y se apresta a corregir la situación con iniciativas fallidas como la creación de las Asociaciones Profesionales de Estudiantes (APE).
Por otro lado, desmantela con facilitad los primeros intentos de organización de la oposición universitaria, y las represalia con dureza. Pero no impide, con todo, el comienzo de un lento aunque imparable proceso de cambio político y académico, que llevará al protagonismo creciente de la universidad en la lucha contra la dictadura y por las libertades.
En Valencia los primeros intentos de organización son más tardíos que en otros distritos universitarios, pero en 1957 se creará el primer grupo del PCE, en 1958 verá la luz la efímera Agrupación Socialista Universitaria, y el nacionalismo valencianista se organizará en 1964 en el PSV, entre otras iniciativas. Son años de invisibilidad, pero también de toma de conciencia, de resistencia.
Estudiants vinculats a les activitats del Sindicat Democràtic d'Estudiants de València (SDEUV). 1966.
Arxiu Marisa Ros i Ferran Montesa
Ámbito 3. Rebelión.
1965-1975
Es el espacio más importante y amplio de la exposición, junto al dedicado a las detenciones del 23 de abril de 1971. En él se trata la progresiva pérdida del control de la universidad por parte del franquismo, la contestación en las aulas a la dictadura. La juventud, como en los años 30, se irá convirtiendo en un agente movilizador de primera magnitud, rompiendo cultural, vital y políticamente con el régimen. Las aulas serán una escuela de aprendizaje político y de valores cívicos que irradiarán al resto de la sociedad.
En esta etapa, el movimiento estudiantil realiza, junto con otros movimientos de contestación, una labor de profundo desgaste de la dictadura. La existencia de un falaz sistema de representación despierta la conciencia de los estudiantes, y la incapacidad del franquismo para responder a las reivindicaciones, junto con la tendencia a la represión, configuran un panorama desolador. El sórdido clima social y cultural hizo el resto, la ruptura con el franquismo fue existencial. Con la influencia constante del exterior (mayo francés, primavera de Praga, Vietnam…), esta generación bebe de y genera una cultura transgresora alternativa (música, cultura, teatro, hábitos, lenguaje..), y dentro de ésta una cultura política que conduce a la fractura. Es un movimiento que mira hacia delante y se inspira en la modernidad.
De manera concreta, en este ámbito se tratará el fin del franquismo en la universidad. Los años 60 vienen marcados por el aumento de conflictos, las constantes movilizaciones y asambleas, las campañas a favor de la amnistía y las libertades, la universidad es el talón de Aquiles del régimen. Mostraremos la creación y posterior desaparición del Sindicato Democrático de Estudiantes Universitarios (SDEUV), la radicalización del movimiento universitario en torno al 68 y la represión masiva del periodo 1968-1975, etapa en la que se integran las detenciones del 23 de abril de 1971.
Soplan aires nuevos para las libertades individuales. Es tiempo de inicio del fin de la mística de la feminidad, de la liberación sexual con su contrapartida de acceso clandestino a los anticonceptivos y al aborto, se dan los primeros pasos hacia el movimiento feminista. Llegan los vaqueros y las melenas. Desaparece la corbata, la falda estrecha, el pelo corto y los cardados. La universidad es el escenario donde se estrenan estos cambios.
En el ámbito académico todo se cuestiona: las nuevas leyes educativas que el gobierno intenta aplicar, los planes de estudio, el contenido de las asignaturas, las clases magistrales, el profesorado más inmovilista. Se rechaza la forma tradicional del ejercicio de la autoridad. También se produce un cambio de posicionamiento en el profesorado y algunos cargos académicos, con las contradicciones propias de los momentos de crisis.
Policia franquista en una manifestació d'estudiants a la Facultat de Ciències a la Ciutat Universitària de Madrid, 1968.
Autor: Barriopedro. EFE
Ámbito 4. Testimonio.
Las detenciones del 23 de abril de 1971.
Este es el espacio expositivo central de la muestra. Propone una aproximación al tema desde la historia oral. Mediante un audiovisual y la recreación de un lugar de la memoria, los protagonistas de las detenciones del 23 de abril de 1971 y de la caída de mujeres de 1969 construirán una historia común, heterogénea y compleja, que llegará al visitante como una narración coral. De este modo, pondremos rostro a lo narrado en las otras secciones. Historia y testimonio comparten espacio en esta muestra, interrelacionándose en la gestión de la memoria.
Ámbito 5. Memoria.
En este espacio reivindicamos la memoria democrática, aquella que considera el conocimiento de los procesos y la transmisión de los valores que han llevado a la democratización de una sociedad como patrimonio ético de la sociedad entera. Pensamos la memoria como instrumento de futuro, y reivindicamos la vigencia de valores como la justicia, la libertad o el compromiso… en la construcción de un mundo mejor.
Estudiants al claustre de l'edifici històric de la Universitat de València. c. 1965. Arxiu Rosa Pastor
Fecha :
Del 13 marzo de 2013 al 1 septiembre de 2013
Horario:
Martes a sábado de 10 a 14 y de 16 a 20 h.
Domingos y festivos de 10 a 14 h.
Entrada libre.
Centro: Centre Cultural La Nau
Salas:
Sala Acadèmia y Sala Estudi General
Organiza:
Vicerrectorado de Cultura e Igualdad de la Universidad de Valencia.
Con el soporte de:
Fundació General de la Universitat de València
Colabora:
Unitat d’Igualtat Institut Universitari d’Estudis de la Dona Delegació per a Estudiants de la Universitat de València Associació Memorial Democràtic 23 d’abril