26 de junio de 2017

- ¿Cuándo y porqué decidiste enfocarte en la psicosomática infantil?

Mi curiosidad en torno a la influencia que el mundo emocional ejerce sobre la salud del cuerpo, y a la inversa, data de hace muchos años. Hace 25 años tuvo lugar mi primer encuentro personal con Pierre Marty en unas jornadas científicas que se celebraron en Bilbao y, animado por él, me decidí a solicitar mi formación en Paris. Su apasionada, original y respetuosa mirada clínica hacia el sufrimiento corporal y anímico (psicosomático) de la persona, coincidían con mi búsqueda de un referente en el campo de la psicosomática. Al poco de iniciar mi formación de Psicosomatólogo en el Hospital de Psicosomática Pierre Marty de Paris se me solicitó ayuda en el Servicio de Pediatría del Hospital de Sagunto para tratar a una bebé de pocos meses en riesgo. Esta circunstancia se convirtió en una experiencia apasionante que me permitió darme cuenta de la importancia del conocimiento especializado en psicosomática perinatal e infantil y de la enorme importancia del trabajo interdisciplinar. En aquel entonces yo contaba con el apoyo de profesores como León Kreisler, Rosine Debray, Miche Fain, Diane L´Heureux le Beuf, Gérard Szwec, Claude Smadja, Maria Eisenstein, Nicos Nicolaidis, André Green, etc. Fueron 5 años apasionantes de formación.

- ¿Cuéntanos un poco de tus técnicas terapéuticas con los niños porque es tan distinta? ¿Cuál es tu opinión o punto de vista acerca de las otras técnicas terapéuticas?

Mi técnica psicoterapéutica con bebés y niños, que incluye a los padres en la sesión, basada en un juego sincero y lúdico sostenido por el placer que se genera siempre en nuestros encuentros tan enriquecedores como vitalizantes para ambos, se desarrolla desde una posición comprensiva del mundo emocional del niño y de su familia, y desde un sentido de humildad y profundo respeto sentido por la persona sensible con la que estoy jugando. El placer de jugar con un ser tan complejo y sensible que sufre y al que debemos de rescatar de su dolor, frecuentemente compartido con su familia, siempre me humaniza y me admira. En nuestros encuentros el placer de estar-con-el-otro, dispuestos a jugar y comunicarnos, es fundamental. Esta técnica es el resultado de una experiencia clínica reflexiva que ha buscado comprender el sentido de las manifestaciones observadas indagándolas con la ayuda de distintos modelos teóricos (psicoanalítico, psicosomático, cognitivista, apego, conductista, sistémico, gestáltico, familiar). Ante la necesidad de obtener prontas mejorías o curas de las diversas psicopatologías muy tempranas, mi preocupación ha sido siempre el ir depurando mi abordaje terapéutico y mis referencias teóricas, confrontándolas permanentemente con la clínica de cada caso. Ante un cuerpo enfermo de distinta gravedad, lo que importa es la eficacia probada o puesta a prueba de los diversos abordajes. Si un abordaje terapéutico no resulta evidentemente eficaz, debe de ser revisado o descartado. La prueba del “algodón” de un abordaje teórico es su eficacia clínica, no sólo en términos de una mejoría somática sino también de unos cambios positivos en la reorganización intrapsíquica, intersubjetiva y relacional del sujeto. Desarrollar una comprensión de los procesos externos o internos que afectan, así como de los recursos intrapsíquicos con los que gestiona el sujeto su sufrimiento, resulta especialmente importante para dar sentido a lo observado y a nuestras intervenciones.

En nuestros encuentros el placer de estar-con-el-otro, dispuestos a jugar y comunicarnos, es fundamental. Esta técnica es el resultado de una experiencia clínica reflexiva que ha buscado comprender el sentido de las manifestaciones observadas indagándolas con la ayuda de distintos modelos teóricos .''

¿Como se originó ASMI y por qué razón fundaste esta asociación?

Mi apasionante experiencia clínica interdisciplinar desarrollada a lo largo de 12 años en el Hospital de Sagunto junto a la Dra Mercedes Benac y otros pediatras y profesionales del Servicio de Pediatría, además de mi experiencia acumulada en Paris, fueron decisivos para promover la creación de ASMI WAIMH España. Yo deseaba que el modelo pudiera extenderse y ser compartido con otros profesionales.

- Si pudieras dar un consejo puntual a los estudiantes del master ¿que quisieras decirles?

Mi empeño profesional siempre estuvo marcado por mi gran curiosidad por entender porqué se producían las manifestaciones clínicas ligadas a las distintas formas de enfermar o sufrir que yo observaba en los bebés, niños/as y sus familias. Esa curiosidad y la originalidad del pensar complejo, que debemos de preservar en nuestra observación, me parecen de especial importancia para mantener nuestro empeño profesional, en todo momento orientado hacia el cuidado de las personas en situación vulnerable.

- ¿Cuál crees que es el punto fuerte de este máster de Psicopatología Perinatal e Infantil?

La diversidad de experiencias interdisciplinares clínicas e investigadoras que aportan los profesores provenientes de distintos lugares del mundo, así como la posibilidad de discutir la clínica perinatal e infantil con los estudiantes de diversas nacionalidades y profesiones a lo largo de todo el máster en el seminario sobre análisis de casos.