La rehabilitación del Lluís Vives permite recuperar un bien patrimonial para la sociedad valenciana, actualizándolo pero manteniendo el tradicional uso cultural del edificio como espacio de encuentro del estudiantado y de actividad de interés social que durante tantos años lo convirtió en un referente para la ciudad.
Por otro lado, se adecuan las infraestructuras a las necesidades de espacio de todos los servicios que se relacionan con el estudiantado para conseguir la funcionalidad y la eficiencia de los servicios que están dirigidos a su atención y a los principales procesos administrativos que interactúan en las diferentes etapas de su experiencia universitaria, aprovechando una oportunidad de mejora para la modernización y adaptación de sus procedimientos.