En el marco del 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, queremos recordar a las víctimas de la violencia de género y poner especial atención en aquellas mujeres y sus hijos e hijas que han sufrido las consecuencias de la DANA en nuestra tierra. 

Las mujeres víctimas de violencia de género enfrentan múltiples vulnerabilidades que se agravan en situaciones de crisis climática como las recientes inundaciones. La pérdida del hogar, la precariedad económica y la falta de redes de apoyo comunitario intensifican el riesgo y perpetúan el ciclo de violencia. Estas mujeres, a menudo invisibilizadas, necesitan una respuesta institucional que contemple la intersección entre la violencia de género y los efectos de las catástrofes naturales. 

Desde el Departamento de Trabajo Social y Servicios Sociales hacemos un llamado a la reflexión y a la acción colectiva. Defendemos la necesidad de políticas públicas sensibles al género y a la emergencia climática, así como un apoyo directo a las personas afectadas por la violencia y la catástrofe provocada por la DANA. Las acciones comunitarias son clave para la construcción de una sociedad justa, libre de violencia y desigualdades. 

Hoy renovamos nuestro compromiso con la formación, la investigación y la sensibilización para erradicar la violencia machista. Invitamos a la ciudadanía a participar en los actos conmemorativos que tendrán lugar en los próximos días en defensa de los derechos humanos y la igualdad.