El mundo científico da la bienvenida al 2016 con cuatro nuevos miembros en la tan preciada tabla periódica. Y es que la Unión Internacional de Química Pura y Aplicada (IUCPAC) ha confirmado que los elementos 113, 115, 117 y 118 serán añadidos a la tabla periódica, completando así la séptima fila.
11 january 2016
Científicos rusos, japoneses y norteamericanos se anotan el mérito de descubrir estos cuatro nuevos elementos, que albergan la condición de elementos químicos superpesados. La propia IUPAC anuncio que los equipos del Joint Institute for Nuclear Research de Dubna (Rusia) y el Lawrence Livermore National Laboratory de California (EE. UU.) habían demostrado ser los descubridores de los elementos 115, 117 y 118; mientras que el elemento 113 fue adjudicado meritocráticamente al Insituto Riken de Japón.
Estos hallazgos, calificados por el premio Nobel de Química japonés Ryoji Noyori como “más valiosos que una medalla olímpica para los científicos”, son el fruto de arduos años de trabajo en laboratorios con ostentosos equipos tecnológicos, en los que no faltó la utilización de aceleradores de partículas. Como resultado, estos cuatro elementos todavía por nombrar y que se conocen únicamente por su número atómico, es decir, el número de protones que alberga su núcleo.
El método consistió en obtener núcleos de elementos superpesados a través de las colisiones entre núcleos de átomos menos pesados, y que permitirán durante los años venideros sentar las bases para descubrir elementos aún más pesados y con un mayor número de protones en los núcleos, como el 119 o el 120, que podrían tener propiedades hasta ahora desconocidas por completo. Al ser creados por el hombre, es decir, ausentes en la naturaleza, tienen una vida muy breve de apenas segundos y una alta radiactividad que complican su estudio y la investigación posterior con ellos.
El presidente de la División de Química Inorgánica de la IUPAC, Jan Reedijk, se mostró entusiasmado con el hecho de que la tabla periódica tenga cuatro nuevos huéspedes después de casi un lustro intacta. “La comunidad química ansía ver a su más preciada tabla finalmente completada hasta la séptima fila”, afirmó el profesor holandés.
Ahora, más allá de estudiar y conocer a fondo sus propiedades, falta identificar a los cuatro elementos, estableciendo su nombre y sus símbolos de manera oficial. Por el momento se conocen con las designaciones provisionales de Ununtrium (113), Ununpentium (115), Ununseptium (117) y Ununoctium (118), a la espera de ser sustituidos por los oficiales.
