El optometrista realiza una revisión completa de su sistema visual, identificando las disfunciones refractivas y binoculares o las alteraciones estructurales, derivando en caso necesario a los profesionales convenientes.
El examen incluye:
- Entrevista para conocer sus antecedentes oculares, motivo de consulta, etc.
- Revisión de la agudeza visual y compensación de los errores refractivos (miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia) y recomendación de la compensación más conveniente en cada caso (lentes de contacto, tipo de lente para gafas o ayuda óptica específica). Si se considera adecuado el uso de lentes de contacto, se derivará al departamento de contactología.
- Revisión de la función binocular y recomendaciones de ergonomía visual. Si existen signos de alteración, se derivará al departamento de visión binocular y terapia visual.
- Control del fondo de ojo mediante la tomografía de coherencia óptica.
- Control de la córnea mediante topografía corneal y biomicroscopia.
- Medida de la longitud del globo ocular para control del posible avance de la miopía.
- Medida de la presión intraocular con tonómetro de aire.