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Trucos para filmar tu primer producto audiovisual

Si eres un apasionado del audiovisual, seguro que ya has sentido muchas veces la inquietud por filmar tu propio producto. Pero el primer proyecto (documental, cortometraje...) siempre genera dudas. Te revelamos algunos consejos prácticos para que tu primera experiencia sea satisfactoria.

6 de junio de 2017

¿Sabes ya lo que quieres grabar? ¿Cuál es la historia que quieres contar? Tómate un tiempo para reflexionar antes de lanzarte a la aventura y ten en cuenta los siguientes trucos para que tu producto audiovisual quede lo mejor posible.

1. Ve mucho cine.

Parece muy evidente, pero algunas veces son tantas las ganas de empezar tu proyecto que no te ha dado tiempo a reflexionar lo suficiente o a ver películas que sean verdaderos referentes para la idea que tienes. Así que el primer paso indiscutible es haber visto mucho cine para afinar tu criterio y hacer una buena obra.

2. Ten tu idea clara.

Si armarse con la mayor cantidad de referentes y profesionales que ya han transitado el camino de la grabación y el montaje es el primer paso, no menos importante es que te tomes tu tiempo para pensar claramente cuál es tu idea que quieres desarrollar. Una importantísima parte del éxito final estará en que hayas sido capaz de tener claro tu esquema mental para después ejecutarlo.

3. Plasma tu idea en un guion.

El documento que contendrá tu idea es el guion, así que cuando ya hayas pensado qué quieres hacer y qué no el siguiente paso es elaborar un guion donde reflejes todo lo que ejecutarás. No importa si lo haces demasiado literal al principio, poco a poco lo modificarás hasta que quede tal y como tú quieres.

Ten en cuenta que un guion es flexible. Modificarás inevitablemente el primer borrador cuando compruebes qué recursos y técnicas puedes utilizar y cuáles no en tu documental

4. No incluyas en el guion lo que sea imposible de realizar.

Ten claros tus recursos, no sólo instrumentales. Si eres novel es normal que al principio sea difícil que plasmes todo lo que quieres. Sé realista y ajusta el guion a lo que de verdad podrás representar visualmente. Poco a poco irás descubriendo técnicas que te permitirán completarlo.

5. Reescribe el guion tanto como necesites.

Si pensabas que el guion es un documento estático y poco dinámico, estás equivocado. Ningún guionista deja de reelaborar el documento. Añade, suprime, reescribe... El cine es un arte vivo, se te irán ocurriendo ideas progresivamente. Por eso, conviene que estés abierto a que tu guion final acabe pareciéndose poco al original.

6. Haz un storyboard.

Es una buena idea que plasmes también en un dibujo cómo serán los planos. Es un documento muy útil para planificar tu rodaje y prever los movimientos de cámaras que harás o tendrás que hacer para mostrar exactamente lo que quieres.

7. Modifica el orden de la historia durante el rodaje.

Evidentemente el rodaje no tiene por qué presentar (y de hecho no presenta) la misma línea cronológica que las escenas que se verán finalmente en la película. Altera el orden de la historia en el rodaje en función de tus necesidades y recursos.

A continuación, puedes ver Luna (1995), uno de los primeros cortometrajes de Alejandro Amenábar que le catapultaron posteriormente al éxito. Todo el mundo empieza con una técnica que debe pulirse, pero, como podrás ver, los primeros guiones ya pueden mostrar destellos de genialidad.