La intervención forma parte de una investigación más amplía basada en generar espacios de comunicación que invitan a recapacitar sobre la imposibilidad de la comunicación del individuo contemporáneo y que toma como referente espacios espontáneos que podemos encontrar en las afueras, en descampados o en polígonos industriales y alrededores de las urbes.
 

Pablo Bellot

San Vicente (Alicante), 1976. En el trabajo de Pablo Bellot encontramos la máxima del mínimo como principio: desarrolla un proceso de eliminación y reducción de lo que es superfluo, utilizando métodos directos y contundentes, donde el proceso creativo tiene especial relevancia gracias a la sencillez, la inmediatez y la espontaneidad. Su obra pictórica es conocida por la utilización del negro, con trazas enérgicas, espontáneas, sin prejuicios y completamente libres. En los últimos años ha realizado videoinstalaciones, instalaciones sonoras, cerámicas, y acciones concretas como actas de comunicación donde codifica y descodifica varios medios de comunicación universales para constatar y evidenciar la imposibilidad de comunicación del individuo contemporáneo. Todo esto unido a otras obsesiones que ha acumulado a lo largo de los años como la violencia, la tragipartida, el bien y el mal, el chiste, el mínimo, la ausencia, la saturación, lo antivisual o las miserias del ser humano para descubrir el momento contemporáneo. Su obra ha sido reconocida por convocatorias de apoyo a la investigación y producción artística como ESCLETXES del Centre del Carme Cultura Contemporània y la Beca Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León. También ha recibido premios como, por ejemplo, en la Biennal Internacional de Ceràmica de Manises, la Bienal Artes Plásticas Ciudad de Pamplona, o la Reial Acadèmia de Belles Arts de Sant Carles.