Del conocimiento
El trabajo de Alexei Grinbaum, cercano del de Jeffrey Bub,
invita a representarse la mecánica cuántica como "una
teoría del conocimiento".
Este ruso de 26 años, que defendió su tesis de filosofía de las
ciencias en la escuela politécnica de París, partió del postulado que,
para elaborar una teoría que describa un sistema, hay
necesariamente que separar el objeto de esta teoría de las
presuposiciones de la misma. Lo que le dejaba dos posibilidades:
o bien partir del principio de que el sistema está regido por
leyes físicas y el objetivo es describir la información que
contiene; o bien concentrarse exclusivamente en la información
de la que se dispone sobre el sistema, y el objetivo es entonces
describir las leyes físicas que lo rigen.
Apoyándose en esta segunda aproximación e inspirándose en las
pistas abocetadas por el teórico italiano Carlo Roveli, Alexei
partió de algunos axiomas que constriñen la información que
se puede extraer de un sistema (dos de los principales, sólo
contradictorios en apariencia son: "existe una cantidad máxima
de información pertinente extraíble" y "siempre es posible
conseguir una nueva información"), axiomas que, al contrario
de los de Jeffrey Bub, NO presuponen la existencia de un
espacio o de un tiempo.
Gracias a algunas hipótesis matemáticas suplementarias, demostró
entonces que una teoría restringida por estos axiomas toma
necesariamente la forma de la mecánica cuántica. La cual se convierte
entonces en una epistemología pura, que ya no se ocupa de describir el
sistema en sí, sino las condiciones impuestas a esta descripcción.