La Economía del Bien Común (EBC), promovida por el economista austríaco Christian Felber, es una propuesta de modelo ecnòmic y social que pretende reorientar el modelo económico actual, basado en la maximización del beneficio individual, y enfocarlo al servicio del bien común y la cooperación.

Los valores fundamentales para los que se rige la EBC y que debería aplicarse a la actividad económica son:

• Dignidad Humana
• Solidaridad y Justicia
• Sostenibilidad Medioambiental
• Transparencia y Participación Democrática

Sobre estas premisas, el modelo de la EBC propone la utilización de unos indicadores diferentes a los indicadores clásicos, es decir, no sólo los aspectos financieros y monetarios. Estos indicadores no nos dicen nada sobre si hay guerra, si se sobreexplota el medio ambiente, si crece la desigualdad, si se respetan los derechos humanos, etc. Del mismo modo que una empresa tenga beneficios no nos indica nada sobre las condiciones de sus trabajadores, el trato a sus proveedores, que produce ni cómo lo produce, ni sobre el impacto ambiental, social o ético derivado de su actividad.

De esta manera se proponen aspectos sociales y culturales para medir el bienestar de un país. Ante el indicador del Producto Interior Bruto se propone como indicador el Producto del Bien Común, el cual incluye también aspectos como la cohesión social, la solidaridad, la participación, la calidad de la democracia, la política medioambiental, el justo reparto de los beneficios , la igualdad de género o la igualdad salarial, entre otros. Para medir el grado de cumplimiento social de una empresa se propone el uso del Balance del Bien Común, por lo que el éxito de una empresa ya no depende de su capacidad para generar beneficios económicos y financieros, sino de su impacto social, es decir, del beneficio que la empresa puede generar en la sociedad y en general en sus grupos de interés.