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Botànic-Jesuïtes: un paisatge compartit

Jardí Botànic, Sala d'Exposicions

 

 

Entrada gratuita. Lunes cerrado. Horario: De 10 a 14h y de 17 a 21h*
* El horario de cierre varía en función del mes, en septiembre a las 20h, octubre a las 19h, noviembre a las 18h

 

El conjunto colegial hacia 1882, ya completado el tridente original al haberse acabado de construir la capilla neobizantina. En la replaza principal se había plantado ya el arbolado que debería delimitar las huertecillas ajardinadas. Archivo José Huguet

 

Organitza y produce:  Vicerectorat de Cultura de la Universitat de València

El espacio de Botánico-Jesuitas puede ser considerado como uno de los entornos históricos de la ciudad de Valencia. Situado extramuros de la ciudad, su emplazamiento entre la orilla del Turia, las murallas y algunas de las principales arterias viarias —la calle de Quart y la carretera de Madrid— lo convirtieron en un entorno privilegiado de la expansión urbana en el siglo xix. Una zona marcada por la instalación del Jardín Botánico y el colegio de Jesuitas que tendría un rápido crecimiento en las décadas finales del sigloxix y acabaría de configurarse a lo largo del siglo xx.

Esta exposición se centra en la evolución paisajística y ciudadana de este entorno. Partiendo de las visiones de los cartógrafos de época moderna, llegamos hasta el presente rememorando la vida del barrio tal como ha quedado plasmada en planos, mapas y fotografías históricas y actuales. Es la historia de un espacio compartido, de las calles, las alquerías, los edificios y los jardines que la han ido conformando con el paso de los siglos. Un entorno urbano, histórico, que podemos disfrutar como visitantes, pero también un espacio vivido por los estudiantes y los vecinos del barrio del Botánico. Un paisaje vivo de nuestra ciudad.

 

Plano del italiano Antonio Manceli, fechado en 1608, que dibuja en perspectiva la trama de la ciudad. Además de su valor historiográfico, es la primera descripción que nos permite conocer las manzanas, las vías y los huertos que integraban la ciudad. Archivo Histórico Municipal de Valencia

El convento de Mínimos, plano de Tosca de 1704. Archivo Histórico Municipal de Valencia

 

 

 

«Entre el río y la muralla, al otro lado de uno de los espacios urbanos más amplios, acotado por el ambicioso recinto de Pedro el Ceremonioso (1356), se encuentra el barrio de poniente que nos ocupa. Uno de sus ejes vitales es el camino —calle, después— de Quart, de probables raíces romanas; el arrabal caminero surgido en torno al convento de mínimos de San Sebastián ya tenía suficiente entidad cuando Anthonie van den Wijngaerde (1563) embastó su vista…»

Vicenç M. Rosselló

«Y es que desde que en el año 1865 se derriban las murallas, la ciudad comienza a extenderse sobre su huerta por medio de pequeñas ordenaciones, denominadas barrios, que van a condicionar y en algunas áreas impedir el posterior desarrollo geométrico del ensanche […] Al norte de la calle de Quart, las calles del Turia, que prolongará su continuidad al otro lado de la calle, y del Quemadero —hoy Doctor Sanchis Bergón— serán los ejes fundamentales para generar solares edificables, dentro de un planteamiento claramente economicista y con escasa visión de futuro…»

Francisco Taberner

 

Vista aérea, hacia 1946, del Colegio de San José desde el cruce de la calle Quart con la Gran Via. Archivo José Huguet

Chicos y chicas del Instituto Escuela, a la salida de clase. [1932-1936]. Luis Vidal. AGE

 

 

de casas y calles es el resultado de una larga historia. Todavía a finales del xix, muchas de las que hoy son ciudades pavimentadas eran espacios con más campo que superficie edificada […] Así era Valencia, una población de 200.000 habitantes diseminados por un gran espacio rural, que se comunicaban por caminos de huerta cuando, en 1880, se construyó el Colegio de San José, en un lugar de la ciudad apartado del centro o, por emplear la terminología jesuítica, “lejos del mundanal ruido”.»

Ramiro Reig 

«En 1930, el colegio privado de los jesuitas proporcionaba una formación secundaria que sólo las clases más privilegiadas podían costear a sus herederos. Aunque también disponían de otras instalaciones menos lujosas, las escuelitas, para los hijos varones de los trabajadores que vivían en el entorno. […] Entre 1931 y 1936, la República realizó un proyecto de modernización y progreso basado en el principio de escuela para todos. […] El edificio de los jesuitas de Valencia pasó a ser sede del Instituto Escuela, de la unificada Escuela Normal de Magisterio y, desde el 1 de febrero de 1937, del Instituto Obrero de Segunda Enseñanza.»

Cristina Escrivà

 

Paseo de los Tilos en el colegio San José. Archivo José Huguet

 

 

Alameda central del Colegio de San José [hacia 1916]. De fondo se vislumbra la escultura de san José y el atrio de ampliación de la capilla, inaugurado en 1916. Archivo de Asociación Antiguos Alumnos. Colegio Jesuitas

 

«Volverán a aparecer las procesiones, las tablas de gimnasia, los partidos de fútbol, las cucañas, las carreras de camareros, las vaquillas y las tracas del día del santo patrón. Al exterior, la urbanidad progresaba lentamente; era 1945, había acabado la guerra mundial y, a finales de año, concluida la urbanización de la Gran Vía junto al paseo de la Pechina, no tardarán en llegar los tranvías amarillos, para darse la vuelta y regresar en sentido contrario, antes de que Manuel Vicent los describiera de azul y blanco. […] El paisaje circundante varía lentamente aunque sin incidencias notables hasta que se levanta la finca Ferca, construida entre 1949 y 1950.»

Adolf Herrero

 

Vista del Jardín Botánico en los años 60. Archivo José Huguet

 

Vista aérea desde el norte, con el eje de la Gran vía Fernando el Católico al centro de la imagen, con el puente de Ademuz acabado de inaugurar. Archivo Conselleria de Cultura. GV.

 

«Desde principios de los setenta, ahora hace ya casi cuarenta años, el paisaje que comparten el Botánico y el Colegio de San José ha sufrido avatares muy diversos. Pero lo más importante, o más definitorio, sea tal vez que en estas cuatro décadas, rodeado ya por un entorno completamente construido, haya pasado a constituirse en un hito paisajístico, digamos verde, integrado definitivamente en la vida ciudadana. De la devaluación al rescate de un paisaje.»

Carles Dolç y Josep Maria Sancho

 

El conjunto Botánico-Jesuitas en la actualidad. La foto se ha tomado en la misma línea directriz que la que se hizo en 1908 desde el campanario de Campanar. Foto de Neus Lozano, 2008

 

En diversas ocasiones, los artistas plásticos han colaborado con Salvem el Botànic. El 27 de marzo de 1999 compusieron unos paneles de 8 x 3 metros que se colocaron en la cerca del solar que da a la gran vía de Fernando el Católico. Foto de Coordinadora Salvem el Botànic