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Estudio sobre calidad de sueño en las personas mayores de la ciudad de Valencia

  • 3 julio de 2023
MANOS DE PERSONAS MAYORES

Un estudio realizado por la Cátedra de Envejecimiento Saludable, Activo y Participativo de la Universitat de València y el Ajuntament de València, visibiliza los problemas de mala calidad de sueño de las personas mayores de la ciudad de Valencia y su relación con el estilo de vida y los marcadores periféricos de la inflamación.

Las alteraciones del sueño son frecuentes en las personas mayores y se asocian a muchos problemas de salud y deterioro de su calidad de vida. Al igual que con la edad se producen cambios físicos, la alteración del patrón de sueño también forma parte del proceso normal de envejecimiento. A medida que envejecemos la arquitectura del sueño cambia y el sueño se vuelve más ligero, lo que conlleva a mayores despertares que privan de tiempo de sueño a las personas mayores. Además, el insomnio crónico es una de las principales causas de caídas, enfermedades metabólicas y depresión en los mayores. Investigaciones recientes demuestran que el aumento de la inflamación afecta negativamente a la calidad del sueño y que la interleucina-1β (IL-1β) desempeña un papel crucial en la regulación del sueño.

La Cátedra de Envejecimiento Saludable, Activo y Participativo de la Universitat de València, junto con la concejalía de Envejecimiento Activo del Ajuntament de València, realizó un estudio durante los años 2021 y 2022, en los Centros Municipales para Personas Mayores de la ciudad de Valencia (CMAPM), con la finalidad de detectar los problemas de calidad de sueño que presentan las personas mayores. La investigación fue liderada por el Dr. Omar Cauli, director de la Cátedra, y participaron las doctoras Rut Navarro, Marisa Ballestar y Vanessa Ibáñez, profesoras e investigadoras de la Facultat d’Infermeria i Podologia de la Universitat de València. Un total de 287 personas mayores fueron entrevistadas y los resultados revelaron que el 41,5% de los participantes padecía insomnio y el 32,4% presentaba síntomas depresivos relevantes. Además, se tomaron muestras de saliva de los participantes y su análisis reveló una correlación significativa entre los niveles del biomarcador IL-1β y la puntuación total de la escala de insomnio de Atenas y los subdominios dificultad para dormir y somnolencia diurna de esta escala. De esta manera, los individuos con insomnio moderado o grave tenían concentraciones significativamente más bajas de IL-1β que los individuos sin insomnio o con insomnio leve. Se trata de uno de los primeros estudios en explorar asociaciones entre el nivel de IL-1β medido en saliva y la calidad del sueño en personas mayores. En cuanto a la relación entre la calidad del sueño y los estilos de vida, se observó que la ingesta de bebidas alcohólicas (incluso una ingesta baja) puede influir en los síntomas de insomnio, de modo que los individuos que tomaban bebidas con contenido alcohólico presentaban menos síntomas de insomnio en comparación con los que no lo hacían. Un 36,9 % de los participantes tomaba fármacos hipnóticos y la puntuación total de la escala de Atenas de insomnio fue significativamente mayor en los individuos que tomaban fármacos para dormir en comparación con los que no los hacían.

El estudio que ha sido publicado en la revista internacional Biological Research For Nursing (BRN), concluye alertando de la necesidad de detectar precozmente a las personas con mala calidad de sueño para poder actuar y evitar la repercusión que estos problemas desencadenan en la salud de las personas mayores. Además, subraya la necesidad de seguir investigando sobre el uso de herramientas de valoración objetivas del sueño como son los biomarcadores salivares. Se trata de métodos no invasivos y de fácil aplicación que pueden resultar muy útiles en la valoración del patrón del sueño, sobre todo en los casos en los que hay deterioro cognitivo y en los que la valoración con escalas es menos fiable.

Enlace del estudio.

Imágenes: