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Siglos XVII y XVIII   Proyecto para la fachada de la biblioteca universitaria. Joaquín Martínez, 1790 

Proyecto para la fachada de la biblioteca universitaria. Joaquín Martínez, 1790

El desarrollo constructivo más importante del siglo XVII es la nueva puerta principal de la Universitat que debía sustituir a la primitiva, situada a los pies de la capilla, en la plaza del Patriarca, y “confrontaba con el orno que sale al patio de dentro” (Orellana).

El arzobispo Juan de Ribera obtuvo del Consell municipal que se hubiera de quitar para siempre y tapiarse de ladrillo y mortero, y costeó la construcción de la nueva puerta, recayente a la calle de la Universidad, que “se tuvo por única puerta principal, la qual tiene sobre su portada un escudo grande de piedra con las armas de la Ciudad”. Esta puerta sirvió en el siglo XVIII de acceso a la Real Academia de San Carlos, instalada entonces en ese sector del edificio. Cuando ésta se trasladó, se llevó el escudo, hoy empotrado sobre la puerta principal del Museo de Bellas Artes de San Pío V.

La erección de los colegios mayores contribuirá a crear el ambiente universitario de la barriada. El de la Presentación fue el primero, dotado por el arzobispo Tomás de Villanueva en 1550 para favorecer a diez pobres que aspirasen a ser sacerdotes. También para teólogos fueron dos de patronato particular; el de la Asunción o de Na Monforta (1561), y el de la Purificación o de Rodríguez (1572). El mejor dotado de todos fue el del Corpus Christi, creado en 1594 por Juan de Ribera. Felipe II mandó erigir en 1563 el de San Jorge, para religiosos de la orden de Montesa, y el doctor Melchor de Villena el de los Santos Reyes (1643), para estudiantes de teología y medicina.

A principios del siglo XVIII, el afán de embellecer el edificio, acrecentando el prestigio de la institución, llevó a la realización de importantes mejoras: casa rectoral, teatro académico y capilla, contemporáneas de la Memoria histórica de la fundación y progresos de la insigne Universidad de Valencia (1730), publicada por el rector Francisco Ortí, primer historiador de nuestra universidad, y de las nuevas Constituciones de 1733. 

El teatro académico, marco de las reuniones del Claustro y de solemnes debates, fue regularizado y ampliado con la adquisición de unos huertos contiguos a Fernando Bonavida, según proyecto de Felipe Rubio de 1733, que lo dotó de una doble entrada desde el patio rectoral. Su grandiosa bóveda tabicada, reforzada por una arcada sostenida por potentes estribos, fue decorada con molduras pintadas de trampantojo; sus paredes se revistieron con retratos e inscripciones de personajes ilustres.

 Proyecto para el teatro académico (Paraninfo), obra de Felipe Rubio, 1732

 La capilla agrandada y reedificada en estilo clasicista por Miguel Martínez provocó el entusiasmo del cronista Esclapés, que escribe: “concluida en el día 15 de Octubre de 1737, es una preciosa perla y abrigando en su altar a la Soberana Aurora de la Sapiencia, la constituye más majestuosa y excelente”. (Resumen histórico de la fundación y antigüedad de Valencia, 1738.)

 Detalle del plano de Valencia de Vicente Tosca (1738), en el que se puede ver el entorno urbano del Estudi General

Detalle del plano de Valencia de Vicente Tosca (1738), en el que se puede ver el entorno urbano del Estudi General