Esa misma tarde se celebrará una mesa redonda y se proyectará un documental
El Instituto de Historia de la Medicina y de la Ciencia López Piñero (centro mixto de la Universitat de València y el CSIC), con sede en el Palau de Cerveró, inaugura el próximo miércoles 21 de mayo, a las 20 horas, en la sala Manuela Solís la exposición Esenciales para la vida. La muestra, que se podrá visitar hasta el 30 de junio, ha sido organizada por la ONG Farmacéuticos Mundi, patrocinada por la Generalitat Valenciana, y cuenta con la colaboración de la Universitat de València y Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Asimismo, cabe destacar que forma parte de una campaña de educación y sensibilización que lleva por título Medicamentos esenciales: recetas que salvan vidas.
Esa misma tarde a las 19 horas, con anterioridad a la inauguración de la exposición, tendrá lugar la mesa redonda Medicamentos que salvan vidas, con la presencia de Marisa Ferrándiz, coordinadora del Grado de Farmacia (UVEG), Carmel Ferragud, investigador del IHMC López Piñero, y miembro de “Algemesí Solidari”, así como María Trelis, licenciada en Farmacia, doctora en Parasitología y profesora en el Departamento de Biología Celular y Parasitología del Máster Internacional de Enfermedades Parasitarias (UVEG) y Eugenia García, directora General de Farmamundi. Durante la charla se proyectará el cortometraje El medicamento, un derecho secuestrado?, documental que cuestiona el sistema de I+D de la industria farmacéutica y pone de manifiesto la corrupción en la regulación y comercialización de fármacos, a través de diversas entrevistas realizadas a importantes personalidades del ámbito de la salud.
Posteriormente, se dará paso a la inauguración de la citada muestra que tiene como primer objetivo llamar la atención ante la dificultad que tienen millones de personas para acceder a la salud y a los medicamentos esenciales, por el hecho de habitar en un entorno rural aislado o por ser mujer e indígena. Además, se denuncia la falta de I+D en tratamientos para enfermedades habituales en los países empobrecidos y el efecto que las leyes de protección de la propiedad intelectual tienen sobre la salud de millones de personas.
Un tercio de la población mundial no puede acceder a los fármacos que necesita, en parte por la falta de infraestructuras y medios de transporte. Las comunidades con baja densidad de población, ya de por sí aisladas, no tienen posibilidad de acceder a los escasos servicios de salud que ofrecen sus países. A través de la historia de María Elena, mujer guatemalteca de 28 años y con cuatro hijos, y Kavira, de Sierra Leona, casada desde los 15 años y embarazada de su quinto hijo, se podrá conocer la situación de estas poblaciones para acceder a servicios básicos de salud.
Juego interactivo y “nudos” con solución
La muestra también propone al visitante un juego interactivo “muy esclarecedor” donde el participante, seleccionando diversos parámetros como edad, género, país, nivel educativo o ingresos, “vivirá” una realidad de acceso a los fármacos diferente según su elección y conocerá las posibles soluciones. Con esta muestra, se pretende sensibilizar a los visitantes sobre la importancia de asegurar el acceso a los medicamentos para la supervivencia de las poblaciones más vulnerables y su desarrollo.
Algunos datos:
- Más del 90% de las enfermedades mundiales se pueden tratar con algo más de 300 fármacos, incluidos en la Lista de Medicamentos Esenciales establecida por la Organización Mundial de la Salud.
- En las zonas rurales, el acceso a los servicios de salud puede llegar a ser un 20% inferior que en las ciudades.
- La falta de servicios de distribución de medicamentos y de una industria local, condicionan el acceso geográfico a los fármacos.
- El 70% de la población mundial que vive con un dólar o menos al día, son mujeres o niñas. El gasto en salud es insostenible, por lo que la mortalidad materno-infantil se dispara.
- Muchos medicamentos comercializados carecen de presentaciones pediátricas, negando a los niños el derecho a la salud.
- Según la OMS, el 10% de los medicamentos que se venden en el mundo son falsos. En los países empobrecidos suponen hasta un 50% de los comercializados.
- 8.000 personas mueren cada día por enfermedades “olvidadas”, aquellas que tienen fácil tratamiento pero que no son rentables para la industria farmacéutica ya que afectan a la población con menos recursos.