Logo de la Universdad de Valencia Logo Máster en Investigación, Tratamiento y Patologías Asociadas en Drogodependencias Logo del portal

Image de la noticia

Dña. Carmen Ferrer Pérez es Psicóloga, Becaria del MEC e Investigadora Pre-doctoral de la Unidad de Investigación Psicobiología de las Drogodependencias, Departamento de Psicobiología, Universitat de València. Alumna egresa del Máster DITPA

En su intervención presentó sus resultados de la investigación que realiza para conocer el papel de la neuroinflamación en la adicción. Su línea de investigación es pionera dentro del área de la adicción. 

Explicó que el sistema inmunitario es un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo contra organismos infecciosos y agentes extraños. Este sistema comprende una serie de barreras que impiden la entrada de estos agentes extraños, así como una serie de células capaces de dar respuesta a una violación de estas barreras. Señaló asimismo, que nuestro cerebro es un órgano inmunológicamente privilegiado que posee como células residentes del sistema inmunitario a la microglía, que tienen función fagocítica tanto de patógenos como de tejidos propios dañados. Esta microglía puede reaccionar ante patrones moleculares que son extraños a nuestro organismo y que reconoce como patógenos (PAMP) e iniciar una respuesta inflamatoria ante ellos. El alcohol, la cocaína y las diferentes drogas de abuso son xenobióticos, compuestos cuya estructura química ha sido sintetizada y no están presentes de forma natural en el organismo, y son capaces de activar la microglía al ser detectados como PAMPs.

Esta activación de la microglía inducida por drogas inicia una respuesta inmunitaria inflamatoria en el cerebro, que de ser repetida en el tiempo puede inducir daño y muerte neuronal. Resaltó que esta respuesta inflamatoria inducida por drogas explica en parte el deterioro cognitivo y conductual observado tras el consumo y abuso de sustancias.

También puso de relieve que el estrés juega un papel crucial en este proceso. Las células inmunitarias poseen receptores para las hormonas del estrés, por tanto, los eventos adversos que activen el eje hipotálamo-hipofisario-adrenal modularán igualmente la actividad del sistema inmune. En la actualidad ya se ha determinado que el estrés social es capaz de poner en marcha los mecanismos inflamatorios de la microglía en el cerebro, y como consecuencia de esta activación aparecen alteraciones en diferentes circuitos cerebrales. El sistema de refuerzo parece verse afectado por este estado inflamatorio del cerebro, registrándose una mayor sensibilidad del mismo a los efectos reforzantes de las drogas tras un proceso inflamatorio.

Por lo tanto, la neuroinflamación tendría un papel doble en los trastornos por uso de sustancias: nos ayuda a explicar una mayor vulnerabilidad en algunos sujetos, así como las consecuencias deletéreas observadas tras el consumo y abuso de drogas.

Lista de enlaces: