La economía china está sufriendo cambios que están poniendo en riesgo su prosperidad ante la duda y la expectación de los analistas internacionales que observan con cautela la evolución del gigante asiático.
22 de marzo de 2016
El año pasado el gigante asiático creció a un ritmo del 7% del Producto Interior Bruto, el que podría ser el crecimiento más bajo en los últimos 25 años. Pero aun así, continúa siendo una cifra elevada a la que muchos expertos ven difícil llegar a finales del actual ejercicio. Los mercados están sufriendo una alta volatilidad en los últimos meses. Las bolsas chinas perdieron alrededor del 10% de su valor a principios de año, pero aunque los mercados estén viviendo una situación convulsa, algunos analistas coinciden en que puede que esta tendencia no acabe contagiando a la economía del país. Un aura de incertidumbre envuelve la actividad económica de China. Estas son sólo cuatro claves para entender la situación acutal.
Estancamiento de la industria
El índice que mide la actividad industrial en china, el PMI, descendió cuatro décimas para situarse en 49 puntos durante el pasado mes de febrero. Para la industria del gigante asiático, el umbral de expansión se sitúa a partir de 50 puntos en el PMI. Una cifra que no se ha alcanzó en febrero, según algunos medios.
Exportaciones
China ha pasado de ser una economía con un potencial de exportación muy elevado a verse reducidas sus cifras a niveles insospechados. Las exportaciones en dólares descendieron un 25,4% respecto al mismo periodo del año pasado, una bajada que no se producía desde 2009. A todo esto se le suma el alto nivel de deuda que acumula este país emergente en plena evolución económica.
Devaluación del yuan
La moneda china también perdió valor en los inicios de 2016. Se estima que salió del país hasta un billón de dólares por miedo y desconfianza de los inversores que cambiaron los yenes por otras divisas para asegurar el valor de sus finanzas. El Banco Central De China redujo la cotización del yen a cifras a las que no se llegaba desde 2011 para reducir así el flujo de capitales hacia el exterior. Esta decisión se suma a la tendencia de devaluación de los últimos años. (También te puede interesar este artículo)
Intervenciones en bolsa
El año nuevo llegó con la entrada en vigor de una medida reguladora que establecía la posibilidad de cerrar las bolsas durante 15 minutos si el grupo CSI-300 caía un 5%. Después de este tiempo, si continuaban descendiendo hasta el 7% la jornada se suspendía hasta el día siguiente. Fue lo que sucedió varios días del mes de enero. Una regulación criticada por muchos analistas que atribuyen la pérdida de valor del mercado chino a esta decisión.
El Banco Popular China inyectó 18.440 euros de liquidez e incluso según El Mundo, algunos fondos estatales realizaron significantes compras en el mercado. Ante esta situación la CRMV lanzó una serie de medidas restrictivas entra las que se encontraba el impedir a los grandes inversores vender el 1% del total de sus acciones cada tres meses.
