Un estudio en el que participan profesores del máster en Prevención de Riesgos Laborales de la Universitat de València pone de relevancia los factores y síntomas del burnout entre los trabajadores de la Administración pública.
13 de junio de 2016
Los puestos de empleo de la Administración pública suelen ser considerados como trabajos estables con unas condiciones dignas. Sin embargo, existen otros factores que provocan la precarización de algunos puestos de trabajo de la red de empleo de las administraciones públicas. Fenómenos como las privatizaciones de empresas de ámbito público, externalizaciones seguidas de despidos y suspensiones de carreras de funcionarios provocan una presión añadida sobre estos trabajadores. Además, estos empleados también están expuestos a continuos cambios en las políticas y la planificación de las tareas, traslados y alteraciones de los proyectos que llevan a cabo.
Los trabajadores públicos se ven sometidos a continuos cambios que provocan inestabilidad y facilitan la aparición de problemas psicosociales
Esta inestabilidad puede llegar a tener efectos negativos en la salud de los trabajadores y desencadenar, principalmente, en enfermedades mentales a raíz del alto riesgo psicosocial de estos factores. De este modo, un estudio en el que ha participado Pedro Gil-Monte, profesor del Máster en Prevención de Riesgos Laborales de la Universitat de València, indica que el síndrome de quemarse por el trabajo (burnout) es una de las consecuencias de estos problemas laborales que aparecen en el sector público.
Consecuencias
En el estudio participaron un total de 8.000 trabajadores de diferentes administraciones públicas que fueron sometidos a un análisis de diferentes cuestiones sobre varios efectos del burnout para identificar el grado de repercusión e influencia que tiene este problema en sus carreras laborales. Se han abordado cuatro efectos de este síndrome:
- Grado de entusiasmo hacia el trabajo. Perspectiva de trabajo, desarrollo de tareas vocacionales y realización personal con las labores que los trabajadores desarrollan.
- Agotamiento psicológico causado por el estrés que produce la inestabilidad, incertidumbre y las dificultades de afrontar cambios de manera frecuente.
- Nivel de indolencia. En muchas ocasiones los problemas psicosociales provocan la aparición de actitudes indolentes de los empleados hacia compañeros o clientes.
- Aparición del sentimiento de culpa debido a la creencia de los empleados que lo sufren de que están llevando a cabo conductas inadecuadas en el trabajo.
La investigación reafirma los resultados de otros estudios en los que se analiza la relación entre el sentimiento de culpa y el burnout en diferentes espacios de trabajo. En esta ocasión también se demuestra que los factores que provocan este síndrome se manifiestan de forma similar en el entorno del sector público.
Los autores advierten que el diagnóstico y el tratamiento de los empleados de la administración pública “son cruciales" en las etapas iniciales de desgaste profesional, "ya que pueden evitar que los síntomas se intensifiquen y facilitar así una recuperación más rápida”.
