El Centro de Investigaciones sobre Desertificación (CIDE) somos un centro público de investigación científica. Por nuestra naturaleza de centro mixto, en nuestra gestión intervienen tres instituciones, la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universitat de València (UV) y la Generalitat Valenciana (GVA), a través de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y la Conselleria de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital.
En el CIDE trabajamos, desde su origen, para aportar conocimiento fundamentado basado en la evidencia científica, y para comunicar a la sociedad la transcendencia de las cuestiones ambientales, y en particular, sobre el riesgo e impacto potencial de la desertificación y el cambio climático sobre los ecosistemas y el ser humano y contribuir, de esta manera, a la protección de nuestro entorno. En este sentido, somos uno de los centros pioneros en Europa en el estudio de la desertificación y uno de los escasos institutos dedicados a este tema, con una base sólida y dilatada experiencia en el estudio de los procesos de degradación del suelo, agua y de los ecosistemas, principalmente mediterráneos. En constante evolución nuestros objetivos estratégicos, recogidos en nuestros Planes de Actuación, están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Para llevar a cabo nuestra labor, contamos con un equipo multidisciplinar con 17 investigadoras e investigadores de plantilla cuyas líneas de trabajo se encuadran en los Departamentos de Calidad Ambiental y Suelos, y Ecología y Cambio Global; y sumamos un total de 65 trabajadoras y trabajadores contando el personal de administración y servicios, técnicos e investigadoras e investigadores pre y posdoctorales.
El Departamento de Calidad Ambiental y Suelos resulta de la fusión de los Departamentos de Degradación y Conservación de Suelos y de Planificación Territorial, aprobada en Junta de Centro el 15 de octubre de 2018. En la actualidad, las actividades del departamento, dentro del marco general de las líneas de investigación del CIDE, se centran en profundizar en el conocimiento, evaluación y seguimiento de la calidad ambiental del territorio, y de los suelos como componente fundamental de este. El eje central es el estudio de los factores y procesos de la desertificación en ambientes mediterráneos. Se incluyen aquí: tipificación de suelos, erosión, contaminación, salinización, pérdida de materia orgánica, sellado antropogénico, incendios forestales, aplicación de la teledetección en los estudios ambientales, cambio global, evaluación de los riesgos y fuentes de degradación ambiental actuales y su posible proyección futura a distintas escalas, a través de sus líneas de investigación.
El trabajo del Departamento de Ecología y Cambio Global, por su parte, se enmarca en la investigación y la docencia sobre la ecología y evolución en ecosistemas secos. Dentro de este marco, dirige sus esfuerzos al estudio de los procesos ecológicos y evolutivos que afectan a las especies, las poblaciones y las comunidades en ecosistemas dominados por la sequía y otros factores de estrés, así como al estudio de los factores que moldean la respuesta de los organismos. Así, la investigación en este departamento incluye desde estudios sobre las características y dinámica de los propios factores climáticos -con énfasis en el viento- y edáficos que afectan estos ambientes, hasta estudios sobre la biología de plantas y animales, la respuesta de los seres vivos a las perturbaciones -especialmente los incendios forestales-, las interacciones entre plantas, suelo y erosión, las interacciones entre especies de plantas –con especial énfasis a los procesos de facilitación-, las interacciones entre animales y plantas (polinización, dispersión, sobrefaunación, etc.) así como las reglas que determinan y estructuran la composición de especies en las comunidades y las consecuencias evolutivas de todos estos factores.
Desde un punto de vista más aplicado, muchos de los estudios que realizamos tienen implicación para la gestión y manejo de nutrientes y del agua en los sistemas agrarios, y en un marco más general para la gestión del territorio, la conservación de la biodiversidad y la restauración ecológica.
El CIDE ha participado y participa en múltiples comités de asesoramiento de investigación y de medio ambiente a nivel autonómico, nacional e internacional. El Centro participó en la elaboración, desarrollo y seguimiento de la Convención de las Naciones Unidas para Combatir la Desertificación, incluido el Anexo IV de la Aplicación Regional para el Mediterráneo; y en los planes regionales y nacionales de control de la desertificación, como el Programa de Acción Nacional contra la Desertificación (PAND). También participa en comités e iniciativas de la Unión Europea, incluida la elaboración de la Estrategia Europea para la Protección del Suelo. Asesora también al Parlamento Valenciano, Generalitat Valenciana (Consejo Asesor y de Participación de Medio Ambiente (CAPMA), Mesa Forestal, Comité de Flora Amenazada, etc.), Parlamento Europeo, OCDE, the Joint Research Centre (JRC), UICN, etc.
Este centro contribuye también a la formación académica y profesional a través de su participación en diferentes másteres y programas de doctorado de distintas universidades (Univ. Valencia, Univ. Politécnica de Valencia, Univ. de Alcalá de Henares, etc.), además de colaborar en la formación de personal universitario por medio de los programas de prácticas tuteladas de las diferentes Universidades.
Un poco de Historia
“Tanto el CSIC como la Universitat de València y la Generalitat Valenciana, conscientes de los graves problemas que afectan a diversas áreas mediterráneas, vienen colaborando en estudios relacionados con la temática de la degradación medioambiental y en los esfuerzos científico-tecnológicos necesarios para evitarla. El interés y preocupación por los desequilibrios medioambientales en las condiciones mediterráneas queda reflejado en la prioridad otorgada a esta problemática…”.” Es deseo de las tres instituciones proseguir su colaboración y profundizar en la investigación de los aspectos científicos cruciales para la lucha contra la amenaza de la desertificación de los ecosistemas mediterráneos”. Convenio de Cooperación entre el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la Universitat de València y la Generalitat Valenciana, para la creación del Centro de Investigaciones sobre Desertificación, con la naturaleza y carácter de centro mixto, 21 de abril de 1995.
El 21 de abril de 1995 se firma el Convenio de Cooperación entre el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la Universitat de València y la Generalitat Valenciana, para la creación del Centro de Investigaciones sobre Desertificación (CIDE, CSIC-UV-GVA). Es el 27 de septiembre de 1996, con la firma de una adenda al convenio, cuando se hace efectiva la puesta en marcha del CIDE. Este momento representa la culminación de un largo proceso iniciado a principios de los años 80 del siglo pasado.
Desde las originarias, Unidad Estructural de Investigación de Fertilidad de Suelos y Nutrición Vegetal del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA, CSIC), liderada desde 1980 por el Dr. José Luis Rubio Delgado, y la Unidad de Investigación de Ciencias de la Tierra de la Universitat de València, encabezada desde 1980 por el Dr. Juan Sánchez Díaz, hasta el Centro de Investigaciones sobre Desertificación (CIDE, CSIC-UV-GVA), se recorrió un largo camino. La oportunidad ligada a la temática, la existencia de grupos de investigación ya consolidados y de importante trayectoria nacional e internacional, y la voluntad de distintas instituciones permitieron actuar en sinergia a grupos con afinidades temáticas, y alcanzar una masa crítica de investigadores suficiente para materializar este proyecto. En su favor, muchas fueron las personas –en el marco institucional del momento-, que intervinieron de manera decisiva, y sin cuya estrecha colaboración y voluntad de cooperación no habría sido posible su puesta en marcha.
El CIDE se ubicó inicialmente en Albal en 1996 y en mayo de 2011 se traslada al campus del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) en Moncada donde tiene su sede en la actualidad.