Hemos tenido la suerte de charlar y entrevistar a Andreu Martínez, egresado de nuestra Facultat de Farmàcia y número 1 del FIR este año.
Está a punto de elegir especialidad y nos comenta que este año han cambiado la manera de adjudicar las plazas. Mientras que otros años la elección era pública y ordenada en función de tu posición FIR, este año se realiza enviando un listado de preferencias, que impide modificar tu elección en función de lo que elijan aquellos que van por delante tuya. Coincidimos en que es una forma de elegir plaza menos transparente. Tras discutir el tema, empezamos la entrevista:
- Lo primero es darte la enhorabuena por haber sacado el número uno del FIR 2021 de toda España (¡y a la primera!).
Muchísimas gracias.
- La primera pregunta es, ¿por qué decidiste ser farmacéutico? ¿Lo tenías claro desde el principio?
No, no lo tenía nada claro. Soy de tomar las decisiones en el último momento y esa decisión también la tomé última hora, justo en el momento de elegir. Desde siempre me han gustado las Ciencias Biológicas y las Ciencias de la Salud, y antes de elegir la carrera estuve dudando entre varias opciones: Bioquímica, Biología, Farmacia... Al final me decanté por Farmacia, entre otras cosas, por todas las salidas laborales que ofrece.
- ¿Esperabas sacar una posición tan buena?
Pues no sé qué decirte. Antes de hacer el examen estaba bastante convencido de que tendría plaza, ya que llevaba el estudio bastante bien, pero claro, no tenía idea de cómo me iba a salir. Cuando acabé el examen empecé a tener más dudas, porque me pareció bastante difícil. Salí sin tener ni idea de qué iba a pasar, y así seguí hasta que salieron las primeras estimaciones de resultados.
- ¿Qué se te pasó por la cabeza cuando te enteraste de la noticia?
¿Al conocer el resultado?
- Sí
Pues lo primero que sentí fue un gran alivio, porque las semanas anteriores había acumulado bastante ansiedad. Después vino el subidón de alegría, y lo celebré con mi familia y con mis amigos. Ya más tarde, al acercarse al momento de elegir plaza, empecé a calentarme la cabeza de nuevo ante todas las posibilidades, pero bueno, eso es otra historia.
- ¿Cuál ha sido tu secreto?
No creo que haya ningún secreto, simplemente estudiar todo lo que se pueda y lo mejor que se pueda. Yo no hice nada diferente a lo que hicieron el resto de las personas que se presentaron conmigo. Creo que, siguiendo la planificación de la academia lo más estrictamente posible, se puede sacar plaza. Si no es a la primera, a la segunda. La clave es ser constante y no perder de vista cuál es el objetivo.
- ¿Como cuántas horas estudiabas al día?
Lo que nos recomendaban desde mi academia eran 14 horas diarias de estudio. Creo que yo no llegué a estudiar esas 14 horas ni siquiera al final, era incapaz de sacarles partido. Durante los últimos meses estudiaba unas 12 o 13 horas. Al final, el número de horas dice bastante poco de la calidad del estudio. Lo importante es aprovechar tiempo que se pasa enfrente de los apuntes.
- Total, que mucho estudio y mucha constancia.
Sí, se trata de eso. El problema es que al final son muchos meses de estudio, y poco a poco te vas desgastando. Lo que hay que intentar es encontrar la motivación para seguir adelante, no tiene más.
- ¿Qué especialidad quieres elegir y dónde quieres hacerla?
Ahora mismo estamos a punto de hacer la elección. Lo más probable es que escoja Análisis Clínicos o Bioquímica Clínica, y seguramente me quedaré en Valencia. Todavía no tengo del todo claro en qué hospital.
- ¿Por qué Análisis Clínicos o Bioquímica, qué es lo que te llama?
La bioquímica me ha llamado la atención desde siempre. Las asignaturas de bioquímica en la carrera me gustaron, desde segundo, hasta Bioquímica Clínica en cuarto, y sobre todo la optativa de Bioquímica Clínica y Patología Molecular en quinto. A partir de ahí empecé a investigar más sobre la especialidad, y, después de visitar los servicios de Análisis Clínicos de varios hospitales, creo que me gusta lo que se hace allí. Me resulta muy interesante la aplicación de los conocimientos sobre bioquímica, fisiopatología y otras disciplinas al trabajo de un laboratorio clínico en un hospital.
- ¿Piensas que la Fac Farmacia prepara bien para el FIR?
A ver, creo que la formación con la que salimos de la carrera es buena como base para ponerse a estudiar para el FIR, pero obviamente no para presentarse directamente al examen. Sería imposible sacar plaza, casi un suicidio, saliendo de cualquier facultad. Cada año el listón parece que está más alto, por lo que la preparación posterior es fundamental. Así que sí, creo que en la Facultat obtenemos una base de conocimientos suficiente, pero pienso que el factor determinante es el período de estudio dedicado en exclusiva a la preparación del FIR.
- ¿Guardas buen recuerdo de la Fac Farmacia?
Sí, la verdad es que sí. Me he ido con buenos recuerdos, de compañeros, y también de profesores.
- ¿Algún recuerdo en concreto? ¿alguna cosa que te venga a la cabeza?
Pues no sé, anécdotas concretas no me vienen a la cabeza, pero tengo muy buen recuerdo sobre todo del último año, a pesar de que fue el más duro y de que quedó interrumpido por el tema de la pandemia. Tengo muy buen recuerdo de las clases de las optativas de ese año, sobre todo de Bioquímica Clínica y Patología Molecular, tanto por la asignatura en sí como por los compañeros y por la profesora, Pilar López. En el segundo cuatrimestre, hice las prácticas en La Fe (en el servicio de farmacia) y el TFG en el laboratorio de Nade Apostolova, y durante esos meses conocí a gente que me aportó mucho a todos los niveles, y de la que también guardo muy buen recuerdo. En general, el último curso fue un desastre por la pandemia, pero por todo lo demás, fue el mejor período de mi paso por la facultad.
- ¿Te ha afectado la pandemia especialmente en tu trayectoria, para bien o para mal?
Sí, como a casi todo el mundo. Para empezar, tuve que dejar el TFG para septiembre porque no pude continuar trabajando en el laboratorio, así que se me alargó el fin de carrera hasta después del verano. Después, a la hora de ponerme a estudiar el FIR, las clases de la academia se redujeron a la vía telemática, como supongo que también pasó en la facultad. Simplemente por el hecho de no estar en clase en contacto directo con otros estudiantes, el estudio se volvió mucho más monótono. Todo se redujo a estar en casa delante de los apuntes durante los meses de estudio. La organización de los exámenes también se vio afectada, evidentemente, la fecha del examen se retrasó… Pero bueno, al final todo se pudo superar.
Y ahí acabamos la entrevista con Andreu Martínez. Ha sido un rato muy agradable. Desde la Facultat de Farmàcia, agradecemos profundamente su disponibilidad y amabilidad.
