
Dentro del ciclo Archivos, investigación y patrimonio científico: una mirada desde la historia de las ciencias, se ofreció el pasado día 4 de diciembre el seminario Weaving worlds: archives, science, and the politics of colonial museums, a cargo del Dr. Mike Jones, archivero, historiador y asesor de colecciones y, actualmente, becario posdoctoral en la Universidad de Tasmania donde estudia diversas historias indígenas y coloniales.
El Dr. Jones empezó su intervención enseñando un mapa en el que se mostraba la diversidad de los pueblos aborígenes australianos, las llamadas Primeras Naciones, con más de 250 naciones e idiomas y 800 dialectos, formando un complejo territorio multicultural.
Desde sus primeros encuentros con europeos, estos se han llevado, comprado o robado multitud de objetos y especímenes de toda Australia. Estos objetos se encuentran expuestos o almacenados en archivos, bibliotecas y colecciones de museos por todo el mundo, a menudo sin establecer un nexo explícito entre los objetos coleccionados y la nación de la que proceden. De ese modo, los museos y archivos han aislado esos objetos de otras piezas relacionadas con ellos y de la cultura de las comunidades a las que pertenecían.
Como ejemplo, tenemos las colecciones de objetos australianos del British Museum, que están etiquetadas como «indígena de Australia» o «aborigen de Australia» y, como origen, dan simplemente el estado de Australia del que proviene, sin detallar la nación. En este sentido, en palabras de Joseph Henry, el primer secretario de la Smithsonian Institution, «el conocimiento no se ha de ver como un conjunto de partes aisladas, sino como un todo en el que cada pieza arroja luz sobre todas las demás».
El Dr. Jones relató la visita al British Museum, en 1794, del librero e historiador británico, William Hutton, una visita en la que el guía no explicó los objetos expuestos con la excusa de que ya había carteles que decían qué era cada objeto. Tras la visita, un frustrado Hutton escribió que «la historia del objeto y el propio objeto han de ir juntos para que la visita tenga sentido. Me apena pensar todo lo que me perdí por no haber tenido un poco de información. La visita duró 30 minutos cuando podría haber durado 30 días. Salí del museo sabiendo lo mismo que cuando entré».
Un problema que afecta a los objetos o especímenes de un museo cuando se exponen o almacenan sin contexto es lo difícil, si no imposible, que resulta determinar su significado, su importancia y su valor cultural y económico. Los museólogos actuales se refieren a estos objetos como «mudos», porque no nos pueden decir nada. En palabras de una anciana aborigen, «los museos tienen las varas, nosotros tenemos las historias. Sin las historias, los museos solo tienen unos palos».
Por suerte, hay un movimiento para cambiar esa situación. La Asociación Australiana de Museos y Galerías ha creado un plan a 10 años vista para aumentar las relaciones con los indígenas australianos y reducir la influencia de las raíces eurocéntricas de los museos.
Este plan consta de cinco puntos
- Reconsiderar el modo en el que se representan a los indígenas australianos en los museos y galerías, reconociendo el papel que los museos han desempeñado en la colonización y en las narrativas históricas dominantes.
- Incorporar los valores indígenas en la gestión de los museos y galerías.
- Contratar personal indígena en todos los niveles y dar importancia a sus conocimientos.
- Traspasar a los indígenas el cuidado del material cultural indígena de los museos.
- Conectar con las comunidades indígenas y devolverles sus objetos.
En lo que respecta a la devolución de objetos, el diálogo se está volviendo más abierto y ya no se trata de devolver solo restos de ancestros u objetos sagrados. El Museo de Manchester devolvió 174 objetos indígenas australianos y su directora manifestó que no lo veía como una pérdida en la colección sino como una ganancia, porque se trataba de crear relaciones con las naciones a las que se les estaban devolviendo los objetos.
Como concluyó el Dr. Jones, los museos y archivos ya no solo han de ocuparse de exponer y conservar objetos, artefactos, especímenes y documentación sino, también, de forjar relaciones entre ellos y de tejer lazos con las comunidades de las que proceden esos objetos.
Jonathan Bustos. Estudiante de prácticas extracurriculares en el IILP