
La hoja de ruta marcada por la Cumbre de París de 2015 pone a las ingenierías españolas en un punto de inflexión sobre el que generar empleo y desarrollo, sobre todo en el cambio de energías renovables.
10 de marzo de 2016
El cambio climático es uno de los temas que más portadas ha acaparado en los últimos años. El inevitable e innegable avance de la contaminación se ha convertido en una de las amenazas más peligrosas para nuestro planeta.
Es por esto que los gobiernos y las empresas alrededor del mundo han empezado a tomar medidas y a buscar nuevos caminos para proteger el medioambiente. La Cumbre de París de 2015 fue el punto de inflexión en las políticas ambientales de las grandes potencias del mundo. El resultado de la conferencia fue una nueva hoja de ruta a seguir por todos los países presentes, así como un acuerdo de cooperación y esfuerzo colectivo, como única forma de salvaguardar nuestro futuro.
Esta nueva perspectiva puede tener un efecto muy importante en el futuro de las ingenierías españolas. El pasado 25 de febrero, se celebró la Jornada ‘Ingeniería y Acción por el Clima’ en el Ministerio de Economía y Competitividad, organizada por Tecniberia y la Fundación Ingeniería y Empresa. La tesis principal sobre la que se trabajó fue que este nuevo panorama mundial supone una oportunidad de oro para convertir estos acuerdos en oportunidades de negocio para los ingenieros españoles.
España cuenta con una prestigiosa reputación internacional en cuanto a sus ingenierías, sobre todo respecto al trabajo relacionado con las energías limpias. Por eso, desde el Máster en Ingeniería Química de la UV se trabaja para ofrecerles a sus alumnos una educación muy enfocada a construir un futuro sostenible, a través del estudio de la ingeniería ambiental o ingeniería ‘verde’. Asignaturas como ‘Gestión y Tratamiento de Emisiones y Residuos Industriales’ y ‘Gestión Integral de la Calidad, de la Seguridad y la de Innovación’ ponen especial énfasis en la protección del medioambiente, y en el papel crucial que jugarán los ingenieros químicos en nuestro futuro. Además, el máster se encuentra bajo la dirección de Vicente Martínez-Soria, ingeniero químico especializado en ingeniería verde.
Nuestro país se encuentra, actualmente, a la vanguardia de proyectos de máximo nivel en energía eólica, solar, hidroeléctrica, nuclear y de biomasa. Las ingenierías españolas, y, en especial la ingeniería química, tiene por delante un fascinante proceso de adaptación de las infraestructuras al cambio climático, lo cual conllevará una mejora en la investigación de materiales, metodología y evaluación de riesgos.
El nuevo plan de acción que ha traído consigo la Cumbre de París, supondrá colocar la lucha contra el cambio climático entre las prioridades en ámbito de inversión. El Foro Económico Mundial planea invertir 1,4 billones de dólares al año en combatirlo, lo cual convierte esta área en una zona de oportunidades para las ingenierías españolas, que se encuentran a un nivel competitivo mucho más alto que el de la mayoría de países; especialmente en el campo de energías renovables.
Publicado por: Antonella Ceruti Andrés