La red V-Heart SN está integrada por nueve universidades y centros de investigación de referencia internacional en este campo.

Trabaja en el desarrollo de un modelo computacional cardiaco –corazón virtual- que pueda adaptarse a cada paciente, lo que permitirá diseñar terapias personalizadas más eficaces y seguras

Ayudará a entender mejor los mecanismos que generan y mantienen las arritmias cardiacas, así como a optimizar la aplicación de terapias (resincronización cardiaca, desfibrilación, marcapasos, etc.) y predecir la eficiencia de los fármacos y su cardiotoxicidad.

Un total de nueve universidades y centros de investigación, entre los que se encuentra el grupo CoMMLab situado en la ETSE, han puesto en marcha la Red Española de Investigación en Modelización Computacional Cardiaca. Bajo el acrónimo V-Heart SN, esta red pretende facilitar la utilización de corazones virtuales –modelos computacionales- en la práctica clínica diaria, lo que permitirá el diseño de terapias personalizadas más eficaces y seguras.

Según destaca el Dr. Rafael Sebastián responsable de V-Heart SN en el grupo CoMMLab “el uso de modelos cardiacos del corazón va a ayudar a planificar intervenciones complejas, y a estudiar hipótesis clínicas en un entorno controlado que permitirá emular el comportamiento real del corazón del paciente.”

La red pretende aunar diferentes áreas de conocimiento e impulsar la creación de métodos matemáticos y herramientas de simulación más avanzadas, que redundarán en la calidad de los modelos, permitiendo de este modo que puedan ser transferidos a entornos clínicos para su validación e implantación.

El grupo CoMMLab aporta a la red su experiencia en la construcción de modelos 3D del corazón a partir de datos médicos de un paciente, con el fin de llevar a cabo simulaciones de la actividad eléctrica del corazón. Además gracias al carácter multidisciplinar del grupo, en el que participan, físicos, matemáticos e informáticos, también se están comenzando a aplicar técnicas basadas en machine learning para poder guiar a cardiólogos en el diagnóstico y planificación de intervenciones complejas.

“Uno de los retos más importantes a los que nos enfrentamos en la red, es la validación de los modelos, es decir, su capacidad de poder predictivo y adopción en entornos clínicos”, indicar el Dr. Sebastián. El desarrollo de este modelo computacional del corazón ayudará a entender mejor los mecanismos que generan y mantienen las arritmias cardiacas; permitirá también optimizar la aplicación de terapias (resincronización cardiaca, desfibrilación, marcapasos, etc.), así como predecir la eficiencia de los fármacos y su cariotoxicidad.

V-Heart SN trabajará en la búsqueda de nuevas soluciones computacionales a los retos de la investigación clínica en el área cardiovascular, así como para situarse como punto de referencia nacional e internacional en la modelización cardiaca, fortaleciendo la posición de la ciencia española en este campo.

Junto a la Universitat de València, forman parte de V-Heart SN la Universidad de Navarra, la Universitat Politécnica de Valencia, la Universitat Politècnica de Catalunya, el Basque Center for Applied Mathematics, el International Center For Numerical Methods in Engineering, la Universitat Pompeu Fabra, el Barcelona Supercomputing Center y la Universidad de Zaragoza. Además, la red cuenta con la colaboración de los principales hospitales y empresas de referencia nacional.

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