El pasado 16 de mayo el Gastrolab-Fernando Sapiña del Instituto de Ciencia de los Materiales de la Universitat de València - UV participó en el programa de la Cuina de Morera en À Punt dando visibilidad a la puesta en marcha del proyecto Nutrigastro-Connection.
Queremos dar las gracias a los pilotos del programa como son el cocinero Jordi Morera y a la nutricionista Ana Sirvent por acercarse a la investigación en gastronomía y nutrición aplicada en los problemas de disfagia. La participación de la alumna Clara Pradas del Grado en Ciencias Gastronómicas de la Facultat de Farmàcia - Universitat de València, junto con Cruz Martínez de la Clínica Universitaria de Nutrición, Actividad Física y Fisioterapia de la Fundació Lluís Alcanyís de la Universitat de València, Nadia San Onofre y Jose Miguel Soriano del Food & Health Lab de la Universitat de València, ha permitido visualizar la importancia de las modificaciones de textura para pacientes con disfagia.
En el laboratorio gastronómico Gastrolab Fernando-Sapiña se desarrollan proyectos reales que permiten a los estudiantes de la Universitat de València aprender y aplicar los últimos conocimientos en el campo. Uno de los proyectos más destacados, como se muestra en la grabación publicada, se centra en la adaptación de texturas en preparaciones culinarias para hacerlas aptas para personas que padecen disfagia. La disfagia es una condición médica que dificulta la deglución y puede afectar seriamente la calidad de vida de quienes la padecen. Por ello en el video, se resalta el meticuloso proceso de modificación de las texturas de los alimentos para asegurar su adecuada ingestión y disfrute por parte de las personas con disfagia.
Este proyecto colaborativo no solo resalta la importancia de la investigación científica en el ámbito gastronómico y nutricional, sino también su impacto directo en la sociedad. Los avances logrados en el Gastrolab Fernando-Sapiña demuestran el compromiso de la Universitat de València en mejorar la calidad de vida de las personas con condiciones médicas específicas, a través de la adaptación de la gastronomía a sus necesidades. Es un ejemplo claro del potencial de la educación y la investigación para generar soluciones innovadoras y socialmente responsables y de cómo la formación de futuros profesionales en Ciencias Gastronómicas impulsa la búsqueda de alternativas culinarias inclusivas y respetuosas con la diversidad de los comensales.
Puedes pinchar en la imagen para ver el vídeo (minuto 20:00 a 23:13)
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