
¿Te has preguntado alguna vez que métodos son los más adecuados para conseguir que tus trabajadores sean más productivos y se involucren de forma eficaz en el trabajo de la empresa?
21 de junio de 2016
A continuación te contamos algunos de los grandes errores que cometen las empresas y que muchas veces repercuten en que algunos de sus mejores empleados abandonen su puesto de trabajo en busca de mejores oportunidades:
- Imponer reglas tontas. Resulta obvio el hecho de que toda empresa u organización requiera de unas normas y reglas que permitan que el ambiente laboral se desenvuelva en un entorno tranquilo y ordenado. Pero no es aconsejable imponer reglas con un marcado carácter restrictivo, normas que puedan interpretarse como absurdas o que provoquen que empleados y empleadas se sientan muy controlados, ya que esto incitará a los mismos a buscar mejores oportunidades en otros puestos de trabajo.
- No reconocer los logros y tratar a todos por igual. Es habitual caer en el absurdo de restar importancia al hecho de felicitar por el trabajo bien hecho y mostrarse agradecido por los esfuerzos realizados. Además, es frecuente ver situaciones en las que se trata a todos los trabajadores de la misma forma, sin tener en cuenta la implicación y la responsabilidad de cada uno de ellos o su metodología en el trabajo. Ha quedado demostrado que este tipo de actitudes llevan a los trabajadores más cualificados a sentirse menos valorados, los cuales buscan otro empleo en el cual se valore de mejor forma cada uno de sus méritos y cualidades.
- No mostrar preocupación por sus trabajadores. Es importante encontrar el equilibrio entre el factor profesional con el factor humano. El hecho de procurar un clima favorable en el entorno laboral resulta imprescindible a la hora de que trabajadores y trabajadoras puedan realizar sus labores de una forma amena y tranquila, la buena relación del trabajador con los directivos y el conjunto de sus compañeros favorecerá el hecho de que quiera permanecer en la empresa.
- No implicar a sus empleados en la visión general del proyecto. Es importante que el trabajador sepa que función tienen las tareas que realiza día a día para entender de esta forma la importancia de su trabajo y sentirse parte de un proyecto común. Cuando se acatan órdenes sin tener en cuenta para que son necesarias, se genera el problema de estar trabajando sin un objetivo propio, hecho que resta calidad al trabajo y produce desánimo en el trabajador, provocando que este se lance a buscar otras oportunidades mucho más atractivas.
Hay que ser consciente de que cuando una persona está a gusto y disfruta lo da absolutamente todo.
- No realizar actividades amenas o divertidas. Todos somos conscientes de que vamos al trabajo a trabajar, pero eso no quita el hecho de que podamos disfrutar con lo que hacemos y por qué no, divertirnos de tanto en tanto. Este es un gran truco para aumentar la productividad y la eficiencia de todos los trabajadores, hay que ser consciente de que cuando una persona está a gusto y disfruta lo da absolutamente todo.
- Tolerar el bajo rendimiento. En el momento en el que la empresa acata y permite conductas responsables de un bajo rendimiento genera un clima de frustración entre aquellos empleados que poseen un alto potencial y que buscan pertenecer a un equipo de profesionales que apuestan por el trabajo bien hecho. Esto frecuentemente se reproduce en el hecho de que el empleado deje la empresa en busca de mejores oportunidades.
- Crear elementos restrictivos que impiden que el empleado pueda perseguir sus metas. Por lo general los mejores trabajadores se caracterizan por su ímpetu, por sus grandes ideas y por las pasiones profesadas hacia su profesión, si la empresa recorta estas cualidades y evoca a que el trabajador desempeñe unas funciones limitadas, provocará que este abandone su puesto de trabajo en busca de otra ocupación que le permita seguir sus propias metas.