Haber estudiado química no quiere decir que te espere un futuro de investigación en laboratorios exclusivamente. Evidentemente, los hay que enfocan su vocación a la investigación; no obstante, muchos otros acaban en profesiones relacionadas con la química, incluso algunos en sectores que poco tienen que ver con la química pero para los que sí que sirven sus conocimientos adquiridos en esta rama científica.
1 de de desembre de 2015
El sector que más engloba a los profesionales de la materia es la industria de la química básica, en la que se trabajan con productos químicos muy extendidos y con precios de producción bajos, como por ejemplo los plásticos, los petroquímicos o fertilizantes, entre otros.
El siguiente sector que más profesionales acoge es el de las industrias de consumo, en la que las empresas adheridas dependen de una demanda que es flexible y su producción está condicionada por esta. Los químicos allí presentes deben garantizar la calidad correcta en todos los procesos de fabricación. Perfumes, textiles… conforman ejemplos de este tipo de industria.
En el sector de la alimentación los químicos también juegan un papel fundamental. Y es que en este tipo de industrias la utilización de químicos ha adquirido una vital importancia para preservar las cualidades de los alimentos durante un tiempo prolongado, utilizando sustancias químicas con tal fin y procurando siempre beneficiar al ser humano. En definitiva, el sector alimenticio está plagado de sustancias que obviamos día a día pero que son imprescindibles para muchas cadenas alimentarias.
La investigación, como no, también requiere la presencia de profesionales, de cara a seguir ampliando más y más los conocimientos en el campo de la química, potenciado por la presencia de nuevas tecnologías que facilitan el trabajo diario.
Con los conocimientos adecuados en química, un profesional puede reconducir su profesión a un campo enorme y con la necesidad de ser trabajado: el medio ambiente. Un sector muy delicado y que cada vez más requiere la presencia de trabajadores cualificados que con sus conocimientos químicos contribuyan a mejorar un sector que permanentemente está en el punto de mira.
Obviamente, como en muchas carreras, la enseñanza siempre es una posibilidad. Con la carrera de química en la mochila podrás ejercer la enseñanza tanto en el ámbito de la educación secundaria como en el de la universitaria. Además, el bagaje académico permite enseñar otras materias científicas. Además, la calidad de los docentes siempre es necesaria para garantizar una transmisión de conocimientos efectiva.
Además de estas opciones, un químico siempre podrá trabajar en la administración pública al cargo de puestos que requieran las cualidades de un profesional de la química. Si no, siempre cabe la posibilidad de emplearse en la dirección empresarial de entidades relacionadas con la química, así como en el márqueting de productos útiles. Todo esto y mucho más, hacen de la química un sector con alta empleabilidad.
