Logo de la Universdad de Valencia Logo Museo de la Universitat de València de Historia Natural Logo del portal

La Zoología es la ciencia de la Biología que se encarga del estudio de los animales. Esta disciplina investiga todos los aspectos de estos seres vivos, como su biología, fisiología, morfología, comportamiento, distribución y ecología de cada una de sus especies. Para desarrollar su actividad, el zoólogo debe recurrir al análisis y manipulación de los ejemplares, por lo que requiere establecer colecciones de animales y precisa conservarlas y mantenerlas en las mejores condiciones posibles. Por este motivo, las colecciones zoológicas han sido de importancia decisiva en el desarrollo de la Zoología. Cada grupo o estructuras de animales que forman una colección, según su composición, textura y naturaleza, requiere de unas condiciones determinadas para su conservación. Unos, pueden preservarse en seco, dentro de unos límites de temperatura y humedad establecidos, mientras que otros ejemplares precisan estar incluidos en líquidos conservantes específicos, resinas, liofilizados, ultracongelados, etc. Con el tiempo, las colecciones zoológicas han ido incrementándose considerablemente y, en la actualidad, se encuentran ubicadas en las principales universidades, museos y centros de investigación de todo el mundo.

Historia de la Colección Zoológica de Vertebrados

Una gran parte de las colecciones de animales taxidermizados que dispone, en la actualidad, la Universitat de València, se encontraban antaño en el Gabinete de Historia Natural, en la Calle de la Nau de la misma ciudad. Los ejemplares se exponían, desde la segunda mitad del siglo XVIII, en una serie de vitrinas en el piso superior del edificio histórico, sede de la Universitat fundada, a finales del siglo XV. En mayo de 1932, un incendio arrasó todo el ala sur del inmueble y afectó principalmente a la sala de exposición del Gabinete, con el resultado de la pérdida de la mayor parte de los fondos de las colecciones. Según fuentes de la época, durante el incendio se estableció voluntariamente un equipo de estudiantes, gente que se encontraba en el lugar y, evidentemente, bomberos y fuerzas locales que retiraron bastantes piezas de la colección antes de ser alcanzadas por las llamas. Estos ejemplares se depositaron, temporalmente, en la estancias de la vecina Iglesia del Patriarca, desde donde serían reconducidos, de nuevo, a emplazamientos de la Universitat. Con posterioridad, la colección se ha ido incrementando con diversas donaciones de instituciones y particulares, y mediante la recolección y preparación de piezas llevadas a término por personal de la Universidad. En la actualidad, cuenta con cerca de un millar de especímenes de diferentes grupos de vertebrados.

La Taxidermia

La taxidermia, del griego "taxisa" (arreglo o colocación) y "dermis" (piel), se define como el arte de disecar animales para conservarlos con apariencia de vivos y facilitar así su exposición, estudio y conservación. Consiste, básicamente, en la extracción de la piel, su curtido, tratamiento y disposición sobre un molde que imite la forma natural del ejemplar. Esta técnica tuvo gran aceptación desde finales del siglo XVIII hasta bien entrado el siglo XX, pues no sólo permitía la conservación de parte del material zoológico para su posterior estudio científico, sino que también facilitaba, a la sociedad contemporánea, la contemplación de animales exóticos o difíciles de observar fuera de sus hábitats naturales, en un momento de la historia en el que este era, junto con grabados e ilustraciones, el único recurso para poder hacerse una idea de estos animales. Por este motivo, gran parte de las colecciones de museos e instituciones conservan numerosos ejemplares preservados por la técnica de la taxidermia, aunque hoy en día esta forma de conservación se encuentra en desuso. En la actualidad, las pieles se conservan sin tratamientos agresivos, en seco y sin disposición en moldes, bajo unas condiciones de temperatura y humedad estrictamente controladas.

Mamíferos-Generalidades

Los mamíferos son un grupo taxonómico dentro de los vertebrados. Su origen se remonta a más de 200 millones de años y surgieron a partir de ciertos reptiles hoy extintos. Las especies primitivas de mamíferos eran de pequeño tamaño y hábitos nocturnos. Convivieron con los dinosaurios, que eran dominantes en aquella época y, hasta la desaparición de estos, no se llegó a producir la verdadera radiación que los ha llevado a ocupar una posición dominante desde la era Terciaria hasta nuestros días. En la evolución de los mamíferos se observa una clara tendencia en el aumento de la actividad, mejora de la locomoción y progreso en la capacidad de obtener y procesar el alimento. Los mamíferos actuales se dividen en tres grupos, diferenciados entre sí, fundamentalmente, por la forma en que se desarrollan sus crías: Monotremas, que nacen de huevos, Marsupiales, que completan gran parte del desarrollo embrionario fuera del útero, en una estructura denominada marsupio y Placentados, hoy en día mayoritarios,  en los que el desarrollo del embrión tiene lugar, por completo, dentro del útero de la madre y es alimentado por un órgano temporal, la placenta.

Esqueletos de león – León Marino Sudamericano

Estos dos esqueletos representan vertebrados del grupo de los Mamíferos. En la evolución de este grupo se observa una tendencia hacia la simplificación del esqueleto respecto de la línea de reptiles de los que descienden. Las costillas quedan reducidas a las de la región torácica lo que, unido a la aparición de la región lumbar en la columna vertebral y una disposición parasagital de las extremidades, les permitirá flexionar el cuerpo en el plano sagital incrementando el tamaño de la zancada y favoreciendo una mayor eficiencia en la locomoción. La simplificación del esqueleto también se observa en el cráneo con la pérdida o reducción de piezas craneales, modificaciones en la articulación mandibular y una especialización dentaria. Concretamente estos esqueletos pertenecen a un león africano (Panthera leo) y un león marino sudamericano (Otaria flavescens). Ambas especies son carnívoras. El primero se alimenta de presas (fundamentalmente, otros mamíferos) que acecha y atrapa con sus garras. El segundo es un depredador de peces y moluscos cefalópodos. La dentición desarrollada es muy similar en las dos especies, debido a una analogía de la dieta carnívora que consumen.

Generalidades y cráneos de cetáceos

Los cetáceos son un grupo de mamíferos con adaptación completa a la vida en el agua, que se han independizado completamente del medio terrestre. Sus patas anteriores se han transformado en aletas, las posteriores han desaparecido y todo su cuerpo ha adquirido una forma hidrodinámica. Estudios moleculares recientes demuestran que los parientes terrestres actuales más cercanos a los cetáceos son los hipopótamos. Las 89 especies que existen hoy en día, la gran mayoría marinas se dividen en dos grupos. El primero corresponde al de los odontocetos o cetáceos dentados, que se caracterizan por poseer dientes y de alimentación basada en peces y cefalópodos, principalmente. A este grupo pertenecen los delfines, calderones, orcas, marsopas, narvales, belugas cachalotes y ballenatos. El segundo grupo reúne a los misticetos o cetáceos barbados, con dentición ausente que, en su lugar, ocupan unas estructuras denominadas barbas compuestas de alfa-queratina. En la actualidad, existen catorce especies dentro de este grupo que se conocen con el nombre de ballenas y rorcuales. Los misticetos consumen peces, invertebrados del plancton (especialmente los crustáceos del krill) o invertebrados bentónicos, que filtran gracias a un sistema en el que intervienen las barbas, a través de las cuales expulsan el agua ingerida, mientras que retienen el alimento en el interior de la boca.