
El cine forma parte de nuestras vidas. Algunos diálogos o lemas de personajes se han transformado en lugares comunes a los que recurrimos para expresar aquello que pensamos o sentimos.
Esta influencia que resulta imperceptible ha sido estudiada por la filmología, la disciplina a la que Sigrid Leyssen dedica buena parte de sus investigaciones.
Sigrid Leyssen es investigadora postdoctoral en L’École de communication de la Universidad Católica de Lovaina (UCLouvain) en Bélgica y visitante en diferentes momentos del Instituto Interuniversitario López Piñero (IILP).
El pasado 1 de marzo presentó en el IILP-UV un seminario titulado la filmología en la España de mediados del siglo XX. En su intervención, comenzó introduciendo la filmología como disciplina: cómo se concebía en sus orígenes, los países donde surgió y la pérdida progresiva de presencia en el mundo académico. Según afirmó: “la filmología nació como una nueva ciencia en París en 1947 con el libro Introduction Générale. Estudiar el cine era interesante para comprender cómo afectaba a los seres humanos a la hora de percibir y comprender el mundo… pero unos objetivos tan amplios requerían un enfoque multidisciplinar, de ahí que la filmología implicara en sus inicios a médicos, psicólogos, sociólogos. Se esperaba un trabajo conjunto en el que todos ellos dieran su perspectiva.” Sin embargo, la investigadora explicó que con el tiempo esta interdisciplinaridad no funcionó. A pesar de los congresos y las publicaciones que aglutinaban todos los trabajos en filmología, el desacuerdo y la prevalencia de unas disciplinas sobre otras acabó paralizando las investigaciones. No será hasta 1953 el momento del resurgir de la disciplina con la publicación de L’univers filmique de Soriau, con conceptos específicos sobre los fundamentos del cine.
Precisamente es en esta época (mediados del siglo XX) donde Leyssen ha encontrado un movimiento de estudio de la filmología en España. Según afirmó: “en 1947 la Asociación Española de Filmología celebraba encuentros regulares en los que se reunían directores de cine, filósofos y también científicos; algunos europeos”. Como explicó: “es en 1951 con la fundación del Departamento de Filmología del CSIC donde la disciplina gana peso institucional, especialmente a través de la figura de Mauricio de Begoña”. En lo sucesivo, Leyssen compartió con los asistentes su investigación acerca de las figuras más significativas de la filmología en España. La investigadora expuso: “Mauricio de Begoña hace una aproximación filosófica a la filmología. Su libro Elementos de filmología. Teoría del cine contiene traducciones de textos europeos y sistematiza la información al tiempo que critica y propone términos alternativos a los ya existentes. Distingue, además los aspectos formales del cine de sus contenidos.” Sin embargo, de Begoña no fue el único nombre vinculado a la filmología en ese período. Leyssen también mencionó a José Germain Cebrian, quién estudiaba el cine desde la perspectiva de la psicología experimental (estaba vinculado al Departamento de Psicología Experimental del Instituto Luis Vives), es decir, desde una aproximación más científica.
La ponencia concluyó con una serie de comparativas del caso español respecto de los casos europeos estudiados por Leyssen: “en organismos como La Asociación Española de filmología había una mayor presencia de cinéfilos que en otras instituciones europeas, con mayor número de académicos” y añadió: “además, la aproximación al estudio de la filmología en España tenía una visión mucho más escolástica que en el resto de Europa y los temas que se trataban encajaban y se aprobaban en el marco de una dictadura”.
Leyssen, que a lo largo de la conferencia había mostrado sus investigaciones de otros casos europeos (por ejemplo, los experimentos de percepción del Albert Michotte) puso de relieve con esta conclusión la importancia de estudiar una casuística amplia, para poder ampliar nuestro conocimiento y perspectiva de una disciplina que nos resulta de escasa familiaridad.
Marina Piedrahita, Estudiante en prácticas del Máster Universitario en Historia de la Ciencia y Comunicación Científica en el IILP-UV.
Sigrid Leyssen mostrando uno de los experimentos de Michotte