Un muestreo en la Albufera este noviembre demuestra la presencia de Vibrio vulnificus, un patógeno típico de zonas cálidas. El cambio climático es real y está presente en nuestro día a día.
Aunque el tiempo no acompañaba, el pasado 9 de noviembre de 2022 nuestro grupo fue a la Albufera de Valencia para muestrear, con el objetivo de encontrar nuestro patógeno de estudio: Vibrio vulnificus (en adelante, V. vulnificus).
V. vulnificus es una bacteria patógena acuática, que habita en zonas salobres de clima cálido, pero que debido al cambio climático, se está extendiendo a zonas más templadas como es nuestro mar Mediterráneo. Esta bacteria infecta normalmente peces, pero puede llegar a ser zoonótica, esto es, que afecte al ser humano. Por todo ello, el estudio de este patógeno resulta de vital importancia para la protección de los animales autóctonos de nuestro alrededor, así como para prevenir casos clínicos.
Ya se habían encontrado cepas de esta bacteria por el Delta del Ebro, así que decidimos visitar nuestro paraje principal, la Albufera, para realizar una búsqueda. ¡Y qué sorpresa nos llevamos! No sólo lo encontramos en el lago, sino también en una de las golas de ésta, en concreto en la gola del Perellonet.
Pero bueno, ¿qué hicimos? Simplemente, tomar agua tanto del lago de la Albufera como de la gola del Perellonet. A continuación, volvimos al laboratorio y filtramos el agua (en condiciones de asepsia), para concentrar al máximo todo lo que pudiera haber.
A continuación, incubamos los filtros en un medio de cultivo llamado APA (Agua de Peptona Alcalina) al 1,5% de cloruro sódico; este medio favorece el crecimiento de V. vulnificus. La incubación duró unas 6 horas, y a continuación se sembró en placas de VVM y TCBS (el primer medio es específico de V. Vulnificus, mientras que el segundo es de V. cholerae).
Al día siguiente, se vio crecimiento en ambas placas. En el caso de VVM (panel A de la figura), las colonias de nuestro patógeno de estudio se observan de color amarillo; en lo que se refiere al cultivo en TCBS (panel B de la figura), las colonias se ven verdes.
Una vez aislada una colonia bacteriana de los medios de VVM de la Albufera como de la parte del Perellonet, se realizó una identificación (y corroboración) de la presencia de V. vulnificus mediante la tira API 20e (panel C de la figura); esta técnica permite identificar bacterias entéricas. ¡Y cuál fue nuestra sorpresa cuando, efectivamente, encontramos nuestro patógeno en nuestra Terreta!
Para hacer honor al lugar donde las aislamos, las hemos llamado Alb1 (por l'Albufera) y Per2tr (por el Perellonet).
¡Buenas noticias para el grupo! ¡Tenemos nuevas cepas para estudiar, y además, de la Terreta! Sin embargo, si nos ponemos serias y serios, obviamente no son buenas noticias. El cambio climático, el calentamiento global de lo que tanto se habla, es real. ¡Y tan real! Microorganismos que habitan zonas cálidas se están desplazando, llegando a zonas donde, como decíamos antes, eran más templadas. Y “eran” y no “son” por el incremento de la temperatura en el globo terráqueo.
Necesitamos concienciación global de la realidad del cambio climático, y que entre todas y todos, luchemos por proteger y salvar nuestro planeta.
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