Este miércoles 29 de febrero se ha celebrado (en la Capilla de La Nau) el “Concert Música a l’entorn de Joan Fuster”, organizado por el Aula de Música de la Universitat de València y la Cátedra Joan Fuster. El concierto forma parte de los actos conmemorativos de la publicación hace 50 años de “Nosaltres, els valencians”, de los veinte años de la muerte del escritor y los noventa de su nacimiento.
Los intérpretes del “Concert Música a l’entorn de Joan Fuster” son Maria de los Llanos, soprano, y Adrià Gràcia, piano. La programación incluye música para poemas de Apel·les Mestres, Xavier Casp, Bernat Artola, Maria Antònia Salvà, Miquel Duran, Lluís Guarner, Francesc Almela i Vives y Joan Fuster.
Fuster, además de ser un gran aficionado a escuchar música, ya desde bien joven, dedicó una gran atención en sus escritos, particularmente en artículos de prensa, a compositores, obras y corrientes estilísticas de varias épocas. Como ilustración de la vivencia fusteriana de la música, se puede recordar una anécdota que contó Josep Pla sobre el momento en qué conoció personalmente a Fuster. Llegó un día del 1959, sin avisar y muy mojado por la lluvia, a la calle de Sant Josep, de Sueca, llamó a la puerta y le abrió el escritor. Pla le dijo que notaba “la casa algo fría”. Entonces, Fuster arrugó ligeramente la nariz y pidió a Josep Palàcios, que estaba de visita, que pusiera “un Vivaldi al tocadiscos”, añadiendo: “es un músico apasionante, nos calentará el ambiente”. A parte de la reacción mental —sarcástica,— que esta respuesta optimista provocó en Pla, se trata de un testimonio muy claro de la importancia que la música —una cierta música— tenía para Fuster en su vida cotidiana y más allá.
Fecha de actualización: 29 de febrero de 2012 09:05.
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