La investigación en el ámbito de la conducción muestra que los conductores podrían beneficiarse de mensajes bimodales auditivos-visuales (Ghirardelli y Scharine, 2009), por ejemplo, cuando se aproximan a un panel de mensaje variable (PMV) con texto y un mensaje auditivo proporciona oralmente el contenido. Curiosamente, hay evidencia de que los conductores recuerdan mejor el mensaje si se recibe a través del sistema auditivo que del visual, por ejemplo, aquellos mensajes que indican la ruta a seguir (Dalton et al., 2013). No obstante, los resultados de Wickens y Gosney (2003) no apoyan una posible ventaja general de los mensajes auditivos sobre los visuales, ni tampoco de los auditivo-visuales sobre los unimodales.

Relacionado con esto, el ámbito del vehículo autónomo supone un cambio de paradigma en el futuro a corto-medio plazo, ya que en esta modalidad de conducción, el conductor queda relegado al rol de “supervisor” del comportamiento del sistema de conducción autónoma (Rezvani et al., 2018), y por tanto, la conducción se vuelve monótona. En este contexto, es fundamental que el conductor identifique mensajes críticos como, por ejemplo, los proporcionados por un PMV señalando cambios inesperados en las condiciones de circulación u otros peligros inminentes sobrevenidos, dado que estas circunstancias son desconocidas para el vehículo autónomo y, ante ellas, el conductor debe considerar recuperar el control.

Así pues, se propone abordar los siguientes objetivos:

1. Estudiar si los mensajes bimodales pueden contribuir a mejorar la percepción y comprensión de los mensajes de tráfico respecto a los mensajes únicamente visuales o si, por el contrario, resultan en una mayor saturación cognitiva para los conductores.
2. Analizar qué factores son relevantes para que se produzca uno u otro efecto.
3. Estudiar cómo influyen los mensajes bimodales y unimodales en tareas de distracción o de baja vigilancia para mejorar la conducción autónoma.

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Generalitat Valenciana (ACIF/2019/160)