Hay una amplia gamma de productos de limpieza del hogar, que si bien facilitan la limpieza, están compuestos por sustancias químicas potencialmente peligrosas tanto para nuestra salud como para el medio ambiente.
Nuestra conciencia sobre el impacto ambiental de los productos de limpieza es muy baja. Una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) realizada el 2020 reveló que el 87% de las personas encuestadas afirmaba tener muy poca información. Cocinar, limpiar y otras actividades domésticas de rutina generan niveles significativos de químicos volátiles y partículas dentro del hogar, hecho que puerta a niveles de calidad del aire interior que se asemejan a los de una ciudad muy contaminada, según investigadores de la Universidad de Colorado *Boulder, en los Estados Unidos. Los productos químicos al aire que se originan dentro de una casa no permanecen a su interior:: los compuestos orgánicos volátiles (*COV) de productos como el champú, el perfume y las soluciones de limpieza finalmente se escapan al exterior y contribuyen a la formación de partículas finas y ozono, cosa que constituye una fuente de contaminación atmosférica global del aire.
En cuanto a la salud, las personas encargadas de limpiar el hogar están expuestas a agentes que pueden resultar nocivos para las vías respiratorias, tanto de asma como de bronquitis crónica. Varios estudios afirman que un 25% de estas dos enfermedades del personal de limpieza doméstica se debe a la exposición a estos agentes.
En este contexto, es importante que asumamos una serie de recomendaciones que conducen a adquirir hábitos de limpieza del hogar saludables. Varios estudios académicos indican la importancia de la limpieza para la salud mental. Limpiar nuestro hogar no solo quema calorías por el esfuerzo físico y evita contagios para mantener la atmósfera ancha, también afecta positivamente nuestra salud mental.
Algunas recomendaciones concretas
El portal www.hogarsintoxicos.org nos propone una serie de recomendaciones para la limpieza al hogar:
- Reduce el uso de productos de limpieza con terpenos con aroma de pino o limón (especialmente en días de alta contaminación por ozono al exterior o cuando se usan aparatos que pueden incrementar la presencia de ozono dentro de la casa, como por ejemplo aparatos purificadores o ionizadores del aire),
- Aclarar bien con agua las superficies después del lavado y también las fregonas y trapos usados, ventilar muy bien durante la limpieza y horas después de ella.
- Reduce la compra de productos de limpieza adquiriendo solo los que veas realmente esenciales. Esto reducirá también la complejidad del cóctel químico que se puede crear en casa.
- Tener los envases muy cerrados y en dependencias de la casa desde las cuales no pueden estar causando emanaciones.
- Hay un creciente mercado de productos ecológicos de limpieza bastante exigentes en cuanto a no contener ciertos grupos de sustancias problemáticas (como ciertas fragancias sintéticas, por ejemplo) y que son tan eficaces o más que los más tóxicos. Pueden adquirirse en *ecobotigues.
- Finalmente, hay soluciones naturales que se usaban perfectamente antes de que una serie de industrias crearan la falsa necesidad de utilizar sus productos químicos sintéticos. Soluciones que permiten prescindir de la compra de productos preparados. Se trata de usar cosas como:
- Bicarbonato sódico
- Vinagre blanco o de manzana
- Limón
- Bórax (este último con alguna precaución)
