El objetivo general de este estudio es ajustar y adecuar la evaluación de los conductores a las características de la población actual.

Entre los objetivos específicos y, acorde con la función preventiva de los Centros de Reconocimiento de Conductores, destacamos la normalización (modernización/actualización) de los baremos de los equipos utilizados para evaluar la capacidad perceptivo-motora de los conductores, acorde con los cambios psicológicos, sociales, tecnológicos, contextuales, etc. que se han producido a partir de la última normalización de equipos (Resolución de la D.G.T. de 14/VI/1987).

Entre los aspectos fundamentales que justifican la necesidad de normalizar los baremos que actualmente se utilizan para evaluar las aptitudes psicomotoras de los conductores, destacan, por un lado, los cambios que en los aspectos psicológicos evaluados en el modelo preventivo español (aptitudes psicomotoras así como aptitudes intelectuales, estilos cognitivos, personalidad y actitudes relacionadas con la conducción) se han producido a través de los años como consecuencia de los avances científicos, económicos y sociales, entre otros.

Por otro lado, el incremento del nivel sociocultural de los sujetos acorde con la mayor disponibilidad y acceso a la cultura; el aumento del conocimiento científico acerca de los procesos psicológicos y de forma más concreta sobre el proceso perceptual que, asociado con otros procesos psicológicos básicos, lleva a la emisión de una respuesta motora; así como el crecimiento espectacular del número de conductores que interactúan en nuestras vías así como del parque automovilístico y, en consecuencia, del número de accidentes, constituyen aspectos fundamentales que refuerzan la necesidad de normalizar los mencionados baremos.

Asimismo, la constante necesidad de mantener un estado de atención dividida y sostenida ante una sucesión de múltiples y continuos estímulos que conforman nuestro ambiente vial; los grandes cambios en la filosofía de fondo (de forma concreta, de una filosofía positiva se ha pasado a otra negativa); los avances tecnológicos (vehículos y vías); y, sobre todo, la búsqueda de una mayor eficacia y perfección en los servicios encargados del reconocimiento de conductores, que sin lugar a dudas repercutirá en el aumento de la seguridad vial de los conductores españoles, constituyen argumentos que justifican la realización de este estudio.

Recerca

Ministerio del Interior. Dirección General de Tráfico