L'Horta de València, como el resto de las huertas históricas valencianas, tiene una larga historia de más de mil años a su detrás. Espacio vivo y vivido por nuestras generaciones presentes, igualmente lo ha estado en los siglos pasados porque no es un espacio natural regido por las leyes de la naturaleza sino, bien al contrario, una construcción humana muy compleja. Es por eso que ha acumulado a lo largo del tiempo todo un amplio abanico de elementos de la cultura material, pero también de la cultura inmaterial, todos ellos son un testigo presente y actual de nuestro patrimonio histórico.

Para poder trabajar la tierra y regarla, para poder captar y hacer circular el agua, para poder transitar por ella, para poder habitarla, para poder trabajar en otros trabajos no agrícolas que complementaron o ampliaron la economía de sus habitantes, para poder delimitarla, reunirse en espacios colectivos laicos y religiosos, para todo esto hizo falta que su población construyera todo tipo de bancales y terrazas, acequias, lenguas y partidores, azudes, caminos, sendas, puentes, acueductos, casas, barracas, alquerías, ceberas, molinos, fábricas, iglesias y ermitas, pueblos y plazas, hitos y mojones.

Pero l'Horta no solo suelo es tierra, agua y cultivos. También es en primer lugar las personas, sus habitantes de siglos que ha vivido, trabajado y festejado. Por eso, l'Horta también nos ha hecho llegar una cultura inmaterial de costumbres y tradiciones de estos varios ámbitos que forman parte de nuestro patrimonio cultural presente. Como regar, como trabajar la tierra, como plantar y dónde y cuando, como construir la alquería o la barraca, como son los derechos de  por caminos y acequias, como era y es la vida cotidiana en el espacio doméstico, como era y es el trabajo de hombres y mujeres, como son las costumbres de los trabajos complementarios en la vida agrícola, como son las fiestas y tradiciones, religiosas o de diversión y baile, de deporte y de cultura en todos los sentidos.

Todo esto es el Patrimonio de l'Horta que estamos reuniendo en este catálogo. Muchos de ellos han desaparecido, pero aun así una parte nos han llegado en mejor o peor sido, algunos muy antiguos, de hace siglos, y otros de la última centuria, pero todos ellos testigos muy valiosos de la cultura histórica de vida y trabajo de la gente de l'Horta.