María Moliner (Zaragoza, 1900 - Madrid, 1981)
María Moliner se licenció en Historia entre 1919 y 1921. A los 22 años ingresa en el cuerpo facultativo de archiveros, bibliotecarios y arqueólogos. En esta época María Moliner forma parte de ese escaso grupo de universitarios que además ejercen una profesión. Ya casada y con hijos se traslada a Valencia en los años de la II República, donde ejerce como directora de la biblioteca universitaria de Valencia y del proyecto de bibliotecas populares. Colabora asimismo con la Escuela Cossío, inspirada en la Institución Libre de Enseñanza y especialmente a la organización de las Bibliotecas Rurales.
Escribió unas Instrucciones sin nombre de autor en 1937 y presentó una comunicación en el II Congreso de Bibliotecas y Bibliografía con el título Bibliotecas Rurales y redes de bibliotecas en España. Fue en 1936 cuando fue nombrada para dirigir la biblioteca de la Universidad de Valencia, cargo que ejerció hasta 1937. Dos años más tarde, redacta las directrices del proyecto del Plan de Bibliotecas que es considerado el mejor plan bibliotecario de España.
En 1946, mientras dirige la biblioteca de una escuela pública, empieza a esbozar las primeras fichas de su diccionario. Su idea era, en palabras de la autora, elaborar “una herramienta total” del léxico, poniendo a disposición de quien lo use, no sólo el significado de las palabras, sino también cómo se usan y por qué otras pueden reemplazarse. En 1966, aparece la 1ª edición de su diccionario no normativo, sino del uso que se hace del idioma al hablar.
Murió en 1981 a causa de una enfermedad degenerativa dejando inacabada una segunda edición del diccionario.