El estudio, que ha contado con la participación de la Cátedra en Economía Colaborativa y Transformación Digital, ha observado durante 120 horas, en puntos específicos de Valencia, un total de 1.443 repartidores, con la intención de analizar las condiciones laborales y los riesgos en el desarrollo de su trabajo.

Los elementos de protección en los repartidores y sus vehículos resultan, en la mayoría, escasos, teniendo en cuenta que se trata de medios de transporte muy vulnerables. El uso del casco se limita al 18% en los repartidores ciclistas, mientras que la obligatoriedad del casco en patinetes eléctricos hace que en este segmento su uso aumente hasta el 94%.

Los datos obtenidos muestran una clara diferencia de género, con sólo un 11% de mujeres repartidoras. Además, un 58% de los repartidores tienen menos de 30 años. Se observó que la mayoría de los repartidores trabajaban con la mochila de la empresa y app de repartos Glovo, un 60% del total y más del doble que su siguiente competidor, Uber Eats, con un 25%, seguida de Deliveroo, con un 10% de los observados.

Sólo el 5,6% de los repartidores mantienen una relación laboral con la empresa para la que hacen los repartos, la mayoría trabajan para Just Eat, y una pequeña fracción trabajan directamente para las empresas de restauración. El estudio destaca que los repartidores que trabajan con un estatus de autónomo están sujetos a la inestabilidad en sus ingresos y con limitaciones en sus derechos en materia laboral y de Seguridad Social.

El profesor Adrián Todolí ha declarado que “La configuración como autónomo permite a la empresa de reparto desatender las condiciones de seguridad y salud de los riders, lo que incrementa, por una parte, las posibilidades de sufrir un accidente y por otro reduce las medidas de seguridad para evitar daños en caso de accidente”.

El principal medio de transporte utilizado por los riders es la bicicleta, utilizada por un 91,5% de los observados, mientras que el uso del patinete eléctrico llega al 8%. Se ha encontrado que los repartidores que trabajan con contrato utilizan más el patinete (22,5% contra un 7,5% de los que trabajan como autónomos). Todolí ya destacaba en un trabajo anterior cómo establecer una retribución por horas al trabajador aumentaría sus incentivos para invertir en mejorar su eficiencia.

En cuanto a los elementos de protección del vehículo (EPV), su implantación es baja en casi todos los casos. El uso de catadióptricos así como el de luces traseras y delanteras de noche, a pesar de ser obligatorias, se limita a un 50%. Por otra parte, elementos como el soporte para el teléfono móvil, vital para este tipo de trabajo, se ha observado en un 87% de los casos.

Enlaces de la investigación:

Cátedra en Economía Colaborativa y Transformación Digital: https://ir.uv.es/tyd0OMw

Informe Ridersen València: https://ir.uv.es/otirP4P

Riesgos laborales específicos del trabajo en plataformas digitales (2020) https://ir.uv.es/LI0jgDI

El trabajo en plataformas digitales en la ComunidadValenciana (2019) https://ir.uv.es/E2WaZPi